Especialidades > Dermatología

"Uno de los fantasmas en Dermatología es ver indicios de maltrato físico"

El especialista De Lucas analiza los protocolos a seguir y recuerda que "el deber de los profesionales es informar"

El jefe de Sección de Dermatología Pediátrica en el Hospital Universitario La Paz, Raúl de Lucas.

13 abr 2022. 12.35H
SE LEE EN 5 minutos
Dentro de las urgencias existentes dentro de la Dermatología se encuentran las patologías cutáneas que se generan por distintos motivos y, por desgracia, la posibilidad de que el paciente haya sufrido maltrato físico. “Siempre que vemos una pérdida de continuidad de la piel, uno de los fantasmas que más tememos los dermatólogos y especialmente en Pediatría es la posibilidad de que el paciente haya llegado a sufrir abusos o de maltrato”, afirma en Redacción Médica el jefe de Sección de Dermatología Pediátrica en el Hospital Universitario La Paz, Raúl de Lucas.

Uno de los principales temores que enciende las alarmas a los dermatólgos es ver indicios de matrato o abusos físicos en la piel. “Podemos pensar en ello cuando recibimos a un paciente de menos de un año con cualquier lesión purpúrica de causa poco clara. Entonces, debemos tener dentro del diagnóstico diferencial esta posibilidad. Ocurre lo mismo que cuando el discurso de la familia o de los acompañantes sea poco consistente o ves que la actitud del niño o niña resulte llamativa”, analiza De Lucas.

Un aspecto que para el dermatólogo resulta fundamental a la hora de valorar esta situación es prestar mucha atención a la localización de las lesiones: “Debemos fijarnos si se han producido en zonas concretas como en las nalgas, frente, mejillas, zona genital o manos. Hay que pensar si las lesiones son sugestivas o ampollosas, pero se debe valorar la posibilidad del maltrato. Otro problema más sutil nos lo encontramos en niños que tienen lesiones en el área del pañal, ves que están descuidados y sucios. Es abandono, una de las formas más crueles de maltrato, y lo podemos ver en urgencias”.

"Debemos fijarnos en la localización de las lesiones y si se encuentran en zonas concretas"


Sospechar es la fórmula defendida por De Lucas a la hora de afrontar estas situaciones y buscar la mejor solución para el paciente: “Se trata de lo más importante para que no se nos pase ningún caso de estos y evitar el sufrimiento de los niños. Debemos intentar que ante cualquier mínimo indicio, comunicarlo a la autoridad competente, un juez en caso de que se sospeche de un abuso y que nuestros pacientes corren peligro. Se activa un protocolo de investigación en los hospitales con los trabadores sociales para analizar el entorno de niño. El médico tiene que sospechar de los indicios sutiles”.

El protocolo a seguir si el paciente está en peligro


Dentro del maltrato que se llega a observar por parte de los dermatólogos no solamente se encuentran las heridas cutáneas, sino que pueden llegar a ser importantes lesiones o traumatismos. “Ante las manifestaciones cutáneas que aparecen en la piel y tienen un discurso poco coherente podemos pensar en un posible abuso. Encontramos lesiones con formas lineales que sugieren un tipo de trauma con un objeto contundente o cortadura”, constata el dermatólogo del Hospital La Paz.

Otro abuso que en más de una ocasión tienen que abordar los especialistas en Dermatología y Pediatría es el sexual, tal y como recuerda De Lucas: “Se trata de otro tipo de maltrato que no debemos olvidar. Hay enfermedades de trasmisión sexual como la sífilis que si no hay contacto estrecho no se produce. En ese caso si aparece en un menor de edad debemos comunicarlo”.

"Es desagradable pensar en la posibilidad de un abuso o maltrato, pero es nuestra obligación"


Para todas estas situaciones, en el Hospital La Paz existe un protocolo general bien definido para poder actuar cuanto antes. “Si vemos que el menor está en peligro damos parte al juez. No somos policías, pero si vemos posibles causas de maltrato tenemos el deber de informar, el juez es el encargado de investigar. Nosotros no nos toca realizar un juicio. Es importante que se valore siempre esta posibilidad y pienso que está infradiagnosticada. Es desagradable pensar en esto y puede ser incluso farragoso, pero es nuestra obligación. Si no pensamos en ello no lo vamos a diagnosticar”, concluye De Lucas.

Las enfermedades cutáneas que requieren consulta urgente


Las patologías cutáneas que puede llegar a sufrir un menor pueden llegar a ser motivo de consulta urgente. Dependiendo de la enfermedad diagnosticada, De Lucas afirma que “pueden ser verdaderas urgencias cuando hay lesiones ampollosas que provocan dolor y mucho picor, ulceraciones, lesiones inflamatorias, fiebre, malestar general, etc. También pueden ser patologías agudas pero que no necesitan urgencia debido a que no pone en peligro la vida, pero puede ser incómoda. En estos casos encontramos brotes de dermatitis atópica, psoriasis, urticaria, etc. Son patologías que asustan, incomodas, pero no es una urgencia vital o importante”.

Dentro de las patologías en dermatología preocupan fundamentalmente todas aquellas que llegan a generar, en palabras del dermatólogo, “ampollas, erosiones, ulceraciones, y también lo que produce purpura, hematomas o equimosis. En definitiva, toda patología relacionada con el daño vascular la epidermis que hace que la piel se levante y que aparezca todo lo descrito. Esto puede tener una causa infecciosa. Hay cuadros producidos por una bacteria, que produce una toxina que hace que se desprenda la piel, o problemas inmunológicos que también afectan de un modo u otro a la piel.

Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.