El pasado sábado, un grupo de personas asaltó el hospital San Agustín de Linares para intentar sacar del centro a un detenido que había sido trasladado hasta allí tras sufrir varias heridas durante una pelea con la policía de la ciudad. Finalmente, y tras un nuevo enfrentamiento, los agentes consiguieron detener el conflicto.
Todo ello comenzó unas horas antes cuando un coche fue detenido por agentes policiales. El conductor hizo caso omiso de las órdenes del policía y se marchó, comenzando entonces una persecución que terminó con una gran pelea entre varios miembros de uno de los clanes más grandes de Linares y los agentes de seguridad.
El resultado fue que un agente intentó ser asfixiado y otro terminó con la mandíbula rota. Además, tres policías nacionales y otros dos locales fueron heridos como resultado del enfrentamiento, teniendo que ser trasladados al hospital para que el personal sanitario pudiese curar sus heridas.
Al finalizar la pelea, los agentes detuvieron a siete miembros del clan. Los detenidos fueron llevados a comisaría, pero poco después uno de ellos fue ingresado en el hospital, donde tuvo lugar la segunda pelea de la noche.
Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.