Un
psiquiatra de Valencia se enfrenta a una
pena de prisión de diez años por, supuestamente,
haber abusado sexualmente de una paciente de 13 años durante la terapia que recibió como consecuencia de una patología que sufría.
Según recoge ABC,
los hechos que se juzgan este martes en la Audiencia de Valencia sucedieron en 2012, cuando los padres de la niña acudieron al especialista para que tratara a la menor, de acuerdo con la información suministrada por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV).
Los supuestos abusos fueron descubiertos por otros psicólogos que trataron a la menor
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Según relata la acusación pública, una vez iniciadas las sesiones, la relación entre el acusado y la paciente se hizo más cercana
y el médico aprovechó la vulnerabilidad de la niña para ganarse su confianza. Así, la convenció para que intimara con él en las sesiones, cuando la sometía a tocamientos y otros actos de carácter sexual.
En junio de 2014, los padres de la joven, "si bien desconocían totalmente las acciones que llevaba el psiquiatra,
por desacuerdo con el tratamiento, ya que no veían resultados, interrumpieron el mismo, acudiendo a otros profesionales", relata el escrito de la acusación pública. A pesar de ello, acusado y víctima siguieron en contacto y concertaron encuentros, debido a la dependencia emocional que la niña tenía respecto del encausado.
Encuentros que se prolongaron hasta noviembre de 2015, cuando los abusos sexuales fueron descubiertos por otros psicólogos que trataron a la menor de los trastornos que padecía. Entonces prohibieron que tuviera contacto con él, aunque en alguna ocasión se fugó para verle.
La menor afectada "es una persona con
una alta vulnerabilidad psíquica, diagnosticada de trastorno alimentario, con rasgos depresivos de personalidad y tendencia a desarrollar graves cuadros depresivos, con autolesiones e intentos de suicidio", señala también el documento.
El fiscal acusa al facultativo de un delito continuado de abuso sexual y reclama una pena de diez años de cárcel en el juicio que se celebrará este martes en la sección cuarta de la Audencia Provincial de Valencia. Además, tras el cumplimiento de la primera condena,
la Fiscalía reclama ocho años de libertad vigilada y otros tantos de alejamiento de su víctima, así como seis de inhabilitación y 20.000 euros de indemnización a la paciente.
Para probar sus acusaciones el Ministerio Fiscal exige la declaración de la víctima y el acusado, además de los psicólogos forenses y diversas pruebas documentales.
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