El Tribunal Supremo ha condenado a dos años y 9 meses de prisión a Ángel Caro Cuadrado, coronel del Hospital Militar Central de la Defensa 'Gómez Ulla' por haber agredido sexualmente de una subordinada. En concreto, la justicia acusa al por entonces jefe de la Farmacia Depósito de la Inspección General de Sanidad situada en este centro de haber abusado de su autoridad para agredir de forma consumada a una teniente enfermero del Servicio de Urgencias de dicho hospital.
La Sala de lo Penal desestima así el recurso de casación planteado por el condenado contra la sentencia del Tribunal Militar Central, que ya le impuso la citada pena de prisión, además de inhabilitarle tanto de empleo como de su derecho de sufragio pasivo dutante el tiempo de condena. El acusado deberá además pagar una indemnización de 5.000 euros por el daño moral causado a la víctima.
Según el Alto Tribunal, el coronel, repentina e inesperadamente besó en los labios a la teniente cuando se encontraban en el sótano almacén de la Farmacia, a donde le había acompañado para darle unos tubos de protección solar.
La teniente, que en ningún momento había consentido ese acercamiento, se desasió y le dijo que no quería nada con él. Pese a su negativa, el coronel volvió a besarla en repetidas ocasiones, diciendo que la amaba "y que quería estar con ella". Incluso llegó a realizar tocamientos primero en las nalgas, después en el pecho y por último en los genitales de la mujer.
"Sus besos y manoseos forzados me dan asco"
La víctima le reiteró vía WhatsApp su oposición, asegurando que "sus besos y manoseos forzados" le daban "asco". "Lo peor que ha utilizado su graduación sabiendo que siempre voy a ser la perjudicada", le espetaba en el mensaje.
Su superior le pidió perdón a través de mensajes enviados desde la misma aplicación en distintas ocasiones. La teniente no respondió a ninguno de ellos y confesó lo ocurrido a la teniente coronel médico Presa García y su amiga y también compañera la médica de Urgencias Margarita del Moral González.
Una vez corroborada la versión de la teniente con testimonios, periciales y mensajes de WhatsApp, el tribunal consideró que constituía prueba de cargo suficiente para sustentar el relato de hechos probados frente a la versión del coronel y procedió a tramitar la condena.
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