La aparición de
nuevos brotes de Covid-19 en toda España ha vuelto a tensar la cuerda del sistema sanitario. Los profesionales, además de lidiar con el
agotamiento físico y psicológico generado en los meses de la pandemia, también deben hacer frente a la
incomprensión de ciertos pacientes, quienes lejos de reconocer su trabajo, les responsabilizan de esta situación e incluso llegan a
agredirles en ciertas ocasiones.
Esta incomprensión de los pacientes se convierte a veces en
amenazas graves contra el colectivo, tal y como denuncia el
Sindicato Médico de Málaga. Pone como ejemplo una reciente publicación en
Facebook, en la que varios usuarios anuncian acciones violentas contra una médico y contra el resto de
trabajadores de un centro de salud en el municipio de Mijas.
"
Hay que matar a toda esta gentuza del centro de salud de Las Lagunas, son unos hijos de puta todos los médicos y personal del centro” o "
debemos unirnos y linchar a toda esa gentuza…” son algunas de las frases amenazantes que aparecen reflejadas en la publicación. Otro de los internautas amagaba con "bajar a urgencias" y "
meter fuego al ambulatorio con todos dentro”.
Comportamiento social irresponsable
Desde el sindicato, consideran que este tipo de delitos "deben ser castigados" por lo que presentará las
denuncias pertinentes ante el juzgado de forma institucional, a la espera de que las autoridades "tomen las medidas oportunas". También lo harán, a título personal, los trabajadores hacia los que se dirigen los ataques.
"Además de que dicho comportamiento resulta contrario a lo establecido por la ley, es un ejemplo de la incomprensión de algunos usuarios ante la situación desventurada que estamos todos viviendo este año y en primera línea, como siempre, el personal sanitario", lamentan desde la organización.
En este sentido, destacan el
sobreesfuerzo realizado por el colectivo durante los meses de verano debido a los rebrotes del virus, que han dejado sin efecto las sustituciones propias de los meses vacacionales. Critican a su vez el
comportamiento de ciertos ciudadanos irresponsables que se niegan a utilizar mascarilla, "perjudicando al resto y al propio personal sanitario". Como prueba, señalan el caso concreto de un paciente que ingresó en la
UCI del Hospital Serranía de Ronda por no utilizar este tipo de protección y que ha provocado el aislamiento de casi todo el personal médico.
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