Al margen de administraciones, profesionales y pacientes, la
mediación para la resolución de conflictos en el ámbito de la sanidad ha suscitado un importante interés de las compañías de seguros por su capacidad para agilizar el pacto y, evidentemente, de evitar la judicialización. “Todo son ventajas si sirve para alcanzar un acuerdo cuanto antes para liquidar la indemnización acordada”, resume
Francisco Sánchez, director de Sanidad y Farmacia en
AON, quien aboga por articular nuevos modelos de responsabilidad médica para “
evitar la frustración de los afectados” y dar “certidumbre a las aseguradoras”.
Esta compañía referente en la gestión de programas de seguros en España ha colaborado ya en la creación de espacios como la
Oficina de Mediación del Servicio Murciano de Salud. Según Sánchez, también han seguido “con detalle” la experiencia de la Plataforma de Redes en
HM Hospitales y el Servicio Madrileño de Salud “con excelentes resultados en ambos casos”.
La Comunidad madrileña, de hecho, fue pionera en la instauración de esta fórmula de mediación extrajudicial. Una filosofía que impulsó a través del
Servicio de Coordinación de Conflictos (SCC) en 2017 con unos resultados inmediatos: al año siguiente se resolvieron lejos de los juzgados el 35,6 por ciento de los 87 expedientes abiertos, 22 de ellos con indemnización.
En los últimos años, también
administraciones como la andaluza y la extremeña han dado pasos en este sentido con resultados satisfactorios. “Para afectados y aseguradoras, en los casos donde hay daño indemnizable y responsabilidad clara, todo son ventajas si sirve para alcanzar un acuerdo cuanto antes para
liquidar la indemnización acordada”, expone al respecto Francisco Sánchez. Destaca, en este sentido, que los profesionales, gabinetes periciales y despachos de abogados “suelen formar parte protagonista en estos procesos”, si bien “los abogados suelen, con carácter general, apostar por las garantías que aporta un procedimiento judicial”.
Nuevos modelos para evitar la judicialización en sanidad
“Nuestra conclusión, en relación con las reclamaciones por responsabilidad médica y su gestión es que cada una
tiene sus propias características y deben articularse
modelos en sentido amplio para evitar la judicialización”, argumenta el director de AON. “En algunos casos muy sensibles debemos acelerar los tiempos; y en otros, por el contrario, se precisan los cumplimientos de los plazos marcados”.
El propio Sánchez asume que las administraciones “están sujetas a encajar, no exento de dificultades, estos procedimientos
en el marco legal”. “Hablamos de mediación en sentido coloquial, ya que los modelos existentes no se ajustan a lo que la ley define como tal y circunscribe al ámbito civil y mercantil”, detalla. Estos problemas pueden ser la causa de que dichas fórmulas hayan tenido hasta ahora “poca continuidad”.
No obstante, incide en que los efectos de esta mediación “son muy claros y compartidos por todos los operadores”: “
Reducción de costes y tiempos de resolución de los casos, evitar la frustración de los afectados y da certidumbre a las aseguradoras”.
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