La SEC reconoce la excelencia en rehabilitación cardiaca de 12 hospitales

La Sociedad Española de Cardiología (SEC) ha otorgado este viernes la acreditación SEC-EXCELENTE en Rehabilitación Cardiaca a un total de 12 hospitales españoles, que cumplen los estándares de calidad asistencial internacionalmente establecidos en el manejo de los pacientes que reciben rehabilitación cardiaca.

Los centros que han recibido el sello de excelencia en un acto celebrado en la Casa del Corazón en Madrid son:

• Hospital General Universitario de Elche - Comunidad Valenciana
• Hospital Universitario Virgen del Rocío - Andalucía
• Hospital La Fe - Comunidad Valenciana
• Hospital Quirónsalud Madrid - Comunidad de Madrid
• Hospital Santa Caterina y Hospital Trueta - Cataluña
• Hospital Universitario Infanta Leonor - Comunidad de Madrid
• Hospital Universitario Central de Asturias - Principado de Asturias
• Complejo Hospitalario Regional de Málaga - Andalucía
• Hospital Universitario Jerez de la Frontera - Andalucía
• Instituto de Rehabilitación Funcional La Salle - Comunidad de Madrid
• Complejo Hospitalario de Navarra - Comunidad Foral de Navarra
• Hospital Universitario de Burgos - Castilla y León

Estas nuevas acreditaciones se suman a la de otros 12 hospitales que ya habían recibido anteriormente la acreditación SEC-EXCELENTE en Rehabilitación Cardiaca.

Beneficios de la rehabilitación cardiaca

Esta sociedad recuerda que el programa de rehabilitación cardiaca es un conjunto de intervenciones coordinadas y multidisciplinares diseñadas para optimizar el funcionamiento físico, psicológico y social de los pacientes con enfermedad cardiaca. Sus beneficios son innumerables.

Por un lado, ha demostrado mejorar la calidad de vida de los pacientes, consiguiendo una mayor capacidad funcional, así como una disminución del estrés, la ansiedad y la depresión. Por otro, tiene efectos a nivel pronóstico, incrementando la supervivencia cardiovascular y disminuyendo los reingresos hospitalarios y las probabilidades de sufrir infartos de miocardio recurrentes. Además, supone un mayor control de los factores de riesgo cardiovascular: aumento en los niveles de HDL (colesterol “bueno”), descenso de triglicéridos y LDL (colesterol “malo”), control de la tensión arterial, disminución del tabaquismo y mejor control de la diabetes y la obesidad, entre otros.

A pesar de los demostrados beneficios de los programas de rehabilitación cardiaca, la implementación en España de estas unidades ha sido "lenta, desigual y es aún insuficiente". Según los datos del registro R-EUReCa, en 2017, existían 113 unidades en todo el país.

"Desgraciadamente, la pandemia de la COVID-19 afectó directamente al funcionamiento de la mayoría de estas unidades al tener que suspender la actividad presencial temporalmente", explican desde la SEC. "Solo pudieron permanecer activas aquellas con programas de telerrehabilitación cardiaca previamente implementados. La vuelta a la presencialidad fue lenta, con grupos muy reducidos inicialmente, lo que disminuyó el acceso de los pacientes a estas unidades con la consiguiente pérdida de los beneficios demostrados de estos programas. Los datos postpandemia aportados por 76 unidades de rehabilitación cardiaca, a través del proyecto Aula RC Registro, han mostrado una reducción del 28,7 porciento en el número de pacientes que accedieron a un programa de rehabilitación cardiaca en 2020, con respecto al año anterior".

Este reconocimiento a la excelencia por parte de la SEC pretende impulsar también el funcionamiento de estas unidades, reconociendo su importancia y promoviendo la generalización de este tipo de programas, que siempre deben garantizar el cumplimiento de los estándares de calidad establecidos.

SEC-EXCELENTE se enmarca en el proyecto SEC-CALIDAD, puesto en marcha hace ya unos años con el objetivo final de mejorar la prevención, diagnóstico y seguimiento de las enfermedades cardiovasculares en España. Para ello es importante reducir la variabilidad de las actuaciones en la práctica clínica y, por eso, la SEC ha desarrollado un proceso que integra la medición, la comparación con estándares, la auditoría, la promoción de acciones de mejora y, finalmente, la acreditación de diversos procesos y procedimientos en Cardiología.