Especialidades > Aparato Digestivo

El cribado de cáncer colorrectal debería adelantarse a los 45 años

En la mayoría de países europeos se generaliza a partir de los 50 años

Tasa de detección de neoplasias según la edad. (Fuente: UEG)

06 nov 2017. 11.20H
SE LEE EN 2 minutos
POR REDACCIÓN
El cribado de cáncer colorrectal debería comenzar a los 45 años de edad, señala un estudio presentado durante la 25 Semana Europea de la Gastroenterología, celebrada recientemente en Barcelona.

Científicos franceses analizaron 6.027 colonoscopias y encontraron un aumento del 400 por ciento en la detección de neoplasias en pacientes entre 45 y 49 años, en comparación con los pacientes de entre 40 y 44 años. Además, la tasa de detección fue un 8 por ciento mayor que en aquellos entre 50 y 54 años.

La media de pólipos y de la tasa de detección de adenomas también aumentó más de un 95 por ciento en estos pacientes frente a los del segmento de edad anterior. Este aumento es más significativo que el incremento del siguiente grupo de edad (19,1 y 11,5 por ciento en pólipos y adenomas, respectivamente).

David Karsenti, el investigador principal, explica que “estos hallazgos demuestran que es a los 45 años cuando se muestra un incremento significativo en la frecuencia de lesiones colorrectales, especialmente en la tasa de detección de neoplasias tempranas”.

Incluso cuando los pacientes con historial familiar y personal de pólipos o cáncer son excluidos del análisis, “todavía hay un incremento significativo en las tasas de detección en pacientes a partir de los 45 años”.

Anualmente, mueren en Europa 215.000 personas por cáncer colorrectal, y tres de cada diez diagnósticos se realizan a personas menores de 55 años. La mayoría de programas de cribado en el continente comienzan entre los 50 y 55 años, y en algunos casos se retrasan hasta los 60.

“Independientemente del tipo de pruebas de detección existentes”, continúa Karsenti, “los resultados de nuestro estudio indican claramente que las pruebas de detección del cáncer colorrectal deberían comenzar a los 45 años de edad. Esto nos ayudaría a incrementar su detección temprana en adultos  jóvenes y nos permitiría, además, identificar y extirpar de manera segura pólipos que podrían volverse cancerosos más adelante”.

Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.