La entrada en vigor de la
reforma laboral generaba puntos de fricción con las reformas planteadas por la
Ley de Ciencia, todavía en tramitación parlamentaria, y que esperan traer una mayor estabilidad a los investigadores en España. Con las contrataciones bloqueadas hasta su publicación definitiva, el
Consejo de Ministros impulsaba una solución
para permitir al personal investigador ser indefinido, sin tasa de reposición, y considerado esencial y prioritario como los profesionales sanitarios.
Una de las cláusulas de la nueva Ley de Ciencia estipula la creación de un
estatuto específico para todo el personal investigador en el Sistema Nacional de Salud, algo que facilita la obtención de una
plaza permanente al modificar algunas pruebas de acceso y reservar plazas en organismos públicos y universidades.
Dicho anteproyecto, pese a las demandas cumplidas, también arroja dudas y discrepancias entre las sociedades científicas, ya que consideran que apenas supone cambios y avanza lentamente. El gremio reclama
retribuciones equivalentes sin externalizaciones en los organismos públicos, la consideración del tiempo de investigación para el acceso a los puestos estatutarios o la consolidación de una única
carrera profesional más específica y detallada.
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La futura ley también incluiría la posibilidad de percibir una
indemnización al finalizar un contrato predoctoral como parte del
Estatuto del Personal Investigador y de Formación. Por lo tanto, cumple con la demanda que reclamaban los investigadores en prácticas durante los últimos años.
Gran acogida al Pacto por la Ciencia
Por su parte, el
Congreso de los Diputados aprobó el pasado 31 de marzo el
Pacto por la Ciencia, una inicativa del Ministerio de Ciencia que contó con el respaldo de más de 70 organizaciones. El pacto aboga por la dotación de recursos materiales, humanos y económicos a la
I+D+i de forma estable y duradera.
En este episodio de '
La Anamnesis de Redacción Médica' hablaremos Olalla Batres y Rocío Lázaro nos ayudarán a desgranar cada una de estas propuestas relacionadas con la
investigación sanitaria y a esclarecer su contenido y sus consecuencias en el personal dedicado a la Ciencia en España.
Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.