Grupo A1+, A1, A2, todo menos el enfrentamiento

Consciente de las movilizaciones actuales en torno a la categoría profesional de médicos y enfermeras, Julián Ezquerra explica minuciosamente por qué no se debe tener únicamente en cuenta la titulación para optar a un nivel A1 en el caso de Enfermería y hasta qué punto la creación del A1+ para los médicos generaría conflictos colaterales con el resto de funcionarios de alto nivel. La solución para acabar con los enfrentamientos entre ambos colectivos y beneficiar a ambas partes la trae en este nuevo episodio del pódcast 'Desde mi atalaya'. 



Antes de nada, Ezquerra explica el origen de estas divisiones con las que se establecían ciertos requisitos en el acceso a determinadas plazas de función pública de cuerpos como los facultativos o las enfermeras. Más allá del acceso mediante un grado, el experto detalla que "no todos los A1 y A2 hacen lo mismo".

- Escucha aquí todos los pódcast de Redacción Médica - 

Cada categoría tiene unas funciones y responsabilidades superiores a las del grupo de clasificación inferior. De esta forma, la entrada a un puesto de función pública establece unos requisitos adicionales a la obtención de un título universitario, ligados a las funciones propias de cada nivel y la dificultad para superar las oposiciones. 

Estatuto propio para sanitarios

Para Ezquerra, el debate generado en torno al cambio de escalafón profesional es una oportunidad idónea para impulsar un régimen específico que marque las reglas del juego para los profesionales sanitarios. En concreto, el experto recupera su idea de establecer un estatuto para profesionales del sector salud con consideraciones específicas, desligando así la figura de los médicos y las enfermeras de la figura del funcionariado. Esto permitiría establecer una clasificación por grupos y responsabilidades, asegura.