María Martín,
consejera de Salud de La Rioja, está convencida de que podrá atender una por una las demandas laborales de los profesionales de la región, gracias a su pequeño y manejable tamaño, tal y como ha explicado en una entrevista con
Redacción Médica. Esta gestión a la carta en un ámbito tan complicado como el de los recursos humanos llama poderosamente la atención, sobre todo en otros servicios de salud más grandes y, por lo tanto, difíciles de gobernar, como el de
Madrid (Sermas) o el de
Andalucía (SAS). No importa la reivindicación: si oferta pública, concurso de traslado, carrera, horario, contrato programa o gestión por objetivos. Todo es posible en
La Rioja de
la nueva consejera Martín, que viene de fuera del sector y eso se nota en su ilusión y ausencia de prejuicios. Ahora bien, todo es posible porque el (pequeño) tamaño, en gestión, sí importa, como ya han demostrado los buenos resultados alcanzados por modelos manejables como
Muface,
Osasunbidea (Navarra) o el propio
Seris riojano, cuya esencia no es posible exportar a otros sistemas más grandes y, por extensión, más complejos.
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