La Revista

Medicina entierra el lado oscuro de las novatadas: "Aquello no eran juegos"

Alumnos y antiguos estudiantes se muestran tajantes contra los "actos vejatorios" durante estas celebraciones

Un acto de iniciación de novatos de estudiantes de Medicina en la Universidad de Extremadura.

23 sep 2023. 13.00H
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POR LARA LEMA
El comienzo del curso trae muchos nervios e ilusión para los alumnos de primer año de Medicina. Rodeados de gente nueva, en un entorno desconocido, en algunas facultades y Colegios Mayores los más veteranos siguen organizando novatadas como forma 'iniciación' a los más jóvenes. Entre los alumnos y antiguos estudiantes hay diversidad de opiniones. Unos las ven como una manera de conocer a gente, y otros critican las "pruebas duras" y la exclusión social de aquellos que no participen. Aunque la situación ha cambiado en los últimos años y los jóvenes se muestran tajantes contra los "actos vejatorios", ya que ese "no es el espíritu" de estas actividades, sino "hacer piña" con los compañeros.

Ana, actual residente de Radiodiagnóstico, comenzó el Grado de Medicina en Valladolid en 2014, donde las novatadas tienen fama de ser las más duras. Pero ella cuenta su experiencia con positividad. "Fue algo divertido, la intención es que te lo pases bien". La MIR relata como durante el primer día de clases los veteranos entraron a las aulas y sacaron a todo el mundo para llevarlos al patio y mancharlos con harina, huevos, bebidas, etc. Las actividades continúan durante todo el primer mes, cada día una diferente: ir a la universidad en pijama; celebrar la fiesta oficial de las novatadas; que cada clase vaya de un color específico, etc. "La idea es romper el hielo, que la gente se conozca entre sí", señala.

La residente apunta que las novatadas "es una de las cosas que forman parte de inciar la carrera" y, además, indica que a cada novato se le asigna un veterano "que será tu persona de confianza para preguntarle las cosas, pedir apuntes... "Es un vínculo que haces para el resto de la carrera", añade.

Por otra parte, Andrea, estudiante de primer año en el Campus de Albacete, indica que en su universidad no hay novatadas. La joven señala que se hizo una fiesta en la feria en donde les pintaron por todo el cuerpo. "Nos sirvió para conocer a gente nueva. Lo pasamos muy bien", asegura.

Novatadas en las residencias y Colegios Mayores


Sin embargo, no todas son experiencias positivas. Una antigua estudiante de la Universidad de Santiago, ahora residente MIR de Familia, cuenta que durante su experiencia vio como se celebraban novatadas en las residencias y Colegios Mayores. "Había de todo", apunta, desde pruebas "un poco durillas, sobre todo a nivel psicológico", hasta "pruebas divertidas". Además, cuenta que una de sus compañeras no quiso participar y "le retiraron la palabra". La residente señala que estas novatadas no eran exclusivas de Medicina, sino que se organizaban en la residencias y Colegios Mayores.

Lucía, otra actual residente, relata que cuando estudió en Santiago vivió los dos primeros años en una residencia femenina de monjas, con otras 40 chicas. "Recuerdo mis novatadas con mucho cariño, me sirvieron para abrirme con mis nuevas compañeras y hacer piña con las veteranas, que al final acabaron siendo mis mejores amigas durante esos años", comenta. "Teníamos que cuidar de un huevo, llevarlo con nosotras a todas partes, hacerle una casa y cuidarlo hasta el final de las novatadas, cuando en mitad del Obradoiro nos lo cascaron en la cabeza. Además, el primer jueves universitario salimos todas juntas con coronas de princesa; o una noche en pijama nos maquillaron mal a propósito y nos sacaron por la zona vieja de Santiago. Hasta acabamos cantado una canción con la tuna siendo grabadas por todos los turistas", rememora.

En su caso, ninguna estaba obligada a participar en las actividades. "Incluso podías dejarlo si te apetecía a mitad de novatadas, que duraban el primer mes pero nadie lo hizo", asegura. "Teníamos una compañera con problemas de movilidad y ella siempre participio en todo y las veteranas hacían por que se sintiera incluida", añade. Lucía afirma que "repetiría la experiencia mil veces": "Llegar a una ciudad nueva donde no conocías a nadie y tener ya un grupo de amigas desde el principio hizo todo más llevadero". 

Pero no todas sus compañeras tuvieron la misma suerte. "En una residencia de Santiago las veteranas encerraban a cada novata por separado en una habitación oscura y le gritaban todas las cosas que no le gustaban de ella: si esta gorda y podría aplastar a un elefante; que la iban a poner a dieta; que si con esa nariz iban a espantar hasta a los pájaros y así hasta que las hacían llorar", afirma Lucía. La joven asegura que esto era conocido, "de dominio público", pero "nadie hacia nada y el año siguiente era más de lo mismo". La residente critica que aquellas mismas novatas que lo pasaron mal, cuando les tocó ser veteranas "en vez de hacer algo por cambiarlo, repitieron los mismo actos, perpetuando así la cadena". 

Prohibir las novatadas: ¿estudiantes a favor?


Cabe recordar que las novatadas con grave menoscabo de la dignidad de las personas, el acoso o el plagio están castigadas con la expulsión de dos meses a tres años de la universidad desde 2021. Eso, junto con las denuncias públicas de alumnos y antiguos estudiantes, parece que ha hecho mella en la celebración de las novatadas. 

Javier Arias, decano de la facultad de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid, asegura que en su centro "no hay novatadas". "El perfil de estudiante que nos llega es diferente, nota de corte altísima, muy centrados, no son del perfil de más fiesta... Siempre ha sido un poco la tradición en Medicina de no hacer novatadas", afirma Arias. 

Por su parte, Andrea se muestra comprensiva con estas prohibiciones: "Entiendo que desde las universidades no estén de acuerdo, porque al final estás sacando a alumnos de la clase, manchándolos...". Y se posiciona a favor de no permitir pruebas que "hagan a la gente sentir mal". "Los extremos son negativos", sentencia. 

Lucía también comparte la opinión de prohibir "todo lo que implique actos vejatorios contra una persona". "Esa gente utiliza el término novatadas para escudarse en sus actos, porque el espíritu de las novatadas no es ese. Y es una pena que la gente se pierda esa tradición por culpa de unos cuantos que se creen que bajo el concepto de que es parte de las novatadas y que todo es de broma pueden hacer lo que quieran y herir a la gente", afirma la joven.


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