La
Red Europea de Bioseguridad ha publicado un observatorio sobre la
situación de exposición a medicación peligrosa de los trabajadores en el ámbito sanitario. El observatorio, presentado en el Parlamento Europeo, recoge las respuestas dadas a un cuestionario dirigido a responsables de Farmacia (147 respuestas) y supervisores de unidades oncológicas ambulatorias (142) en 14 países, entre ellos España, y que ha gestionado la empresa especializada
Ipsos Mori.
Los datos reflejan la
necesidad de que Europa regule de forma específica la
protección a los trabajadores. El uso de
sistemas cerrados, la preparación de medicación exclusivamente en los servicios de Farmacia, el
análisis de riesgos, la
monitorización regular de superficies, la
formación y educación de los trabajadores, son entre otras,
áreas de mejora en la protección a los trabajadores frente a la exposición a medicación peligrosa.
Resultados del observatorio en España
Los resultados del observatorio a nivel nacional (donde se realizaron 32 entrevistas: 16 jefes de farmacia y 16 supervisores de unidades oncológicas ambulatorias) ponen de manifiesto que
aún queda mucho por hacer en la protección de los trabajadores frente a la medicación sanitaria.
Entre los datos del observatorio cabe destacar :
• El alto volumen de preparaciones de medicación peligrosa que todavía se realizan
fuera de los servicios de Farmacia: un 37 por ciento.
• La
baja tasa de utilización de sistemas cerrados en preparación de medicación, un 32 por ciento, y la tasa tan elevada de uso de jeringas y agujas, también del 32 por ciento, con el
alto riesgo que esta práctica supone para los trabajadores sanitarios. En administración el uso de sistemas cerrados solamente representa el
42 por ciento del total.
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Los datos de España ponen de manifiesto la necesidad de una norma específica nacional
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Falta de monitorización de los niveles de medicación en superficies, tanto en lo servicios de Farmacia como en los servicios de Oncología Ambulatoria (sólo un 25 por ciento en farmacia y un 56 por ciento en administración, si bien los resultados parecen indicar que en administración los porcentajes reales son muy inferiores).
• El
registro de los trabajadores expuestos y del nivel de exposición solo existe en el 30 por ciento de los centros.
• Solo el
50 por ciento de la medicación peligrosa esta identificada en los sistemas de prescripción y administración electrónicos.
• En una media del 25 por ciento de los centros el
uso de equipos de protección individual en la administración de medicamentos sigue siendo insuficiente.
• La
formación y
comunicación sigue siendo una asignatura pendiente tanto en los servicios de Farmacia como en las unidades de Oncología Ambulatoria.
Estos datos ponen de manifiesto la n
ecesidad de una norma específica a nivel nacional para la prevención de los trabajadores a la exposición de medicación peligrosa.
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