Superar un
cáncer de mama implica más esfuerzo que el propio tratamiento médico. El
apoyo psicológico tanto del equipo sanitario como de otras pacientes puede ser clave a la hora de seguir el camino hacia la recuperación. Un camino donde los profesionales saniatrios pueden aportar mucho más que el
propio diagnóstico y seguimiento médico. Acompañar, escuchar y humanizar la sanidad en el cáncer puede llegar a suponer una gran diferencia en el resultado final.
Una de las fórmulas que se llevan a cabo desde el
Hospital Universiatrio de Valme, en Sevilla, reúne a pacientes y profesionales en múltiples actividades, donde la humanización sanitaria es la base de cada una de las actuaciones. Creado en 2016, el proyecto Chicas Rosas nació como un punto de reunión y esparcimiento para mujeres con cáncer de mama. Hoy en día es uno de los proyecto que más luz arroja sobre una patología que
en 2022 ha afectado a unas 24.750 mujeres según la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM).
Al frente del proyecto Chicas Rosas se encuentra una facultativa ya jubilada, pero que sigue al pie del cañón.
Carmen Delgado Jiménez, quien fuera
cirujana especializada en patología mamaria del Hospital Universitario de Valme, ha acercado a Redacción Médica las claves del éxito del proyecto, en el que en su última edición se ha quintuplicado la
participación con unas 26 mujeres afectadas.
¿Cuál es el origen del proyecto Chicas Rosa?
El Proyecto Chicas Rosas constituido desde hace dos años en Asociación sin ánimo de lucro nace en 2016 en la Unidad de Mama del Hospital de Valme , de Sevilla. La enfermera Josefa Cantero, el radiólogo de mama Fausto Rubio y yo nos hicimos eco de la experiencia que a pacientes con patología cardíaca les suponía peregrinar a pie hasta Santiago de Compostela y orientadas por algunos de ellos nos pusimos en marcha. Y así, en el mes de junio, varios profesionales sanitarios y cinco mujeres que habían padecido cáncer de mama recorrimos caminando, en cinco etapas, los 125 kilómetros que unen Sarria con Santiago. La experiencia, vivencias, sentimientos y aprendizaje fue tan positivo para las chicas rosas como para nosotras. Para ellas porque compartieron con iguales un esfuerzo físico y mental que no estaban seguras de poder afrontarlo y para nosotras porque trascendimos de nuestra relación con ellas en el medio sanitario y pasamos a compartir los valores humanos en una nueva dimensión.
Tras dos años se ha retomado la ruta Xacobea ¿Por qué se eligió esta ruta? ¿Qué implicaciones puede tener para pacientes y sanitarias?
Este año 2022 hemos realizado el Camino Portugués, desde Valencia do Miño a Santiago, que ya lo teníamos bastante organizado cuando nos sobrevino la pandemia Covid-19. Y nuevamente, volvemos con ganas de iniciar los preparativos para el siguiente.
A su pregunta sobre las implicaciones de este proyecto, le aseguro después de cinco ediciones que para las chicas rosas, como se autodenominaron ellas en la primera edición, les permite recapacitar sobre su vivencia de la enfermedad y como la están afrontando, les desaparece el miedo a ser frágiles, a no poder finalizar cada día la etapa fijada. Aprenden a rebajar el nivel de exigencia consigo mismas y con los demás. Y ese superar miedos y vencer incertidumbres igual nos lo aplicamos las profesionales sanitarias, la enfermera, el radiólogo, la cirujana que sin alardes les han explicado el sentido del Proyecto que no es otro que hacer el Camino de Santiago con las Chicas Rosas como centro y razón de ser del mismo en la certeza de que tienen la fuerza física y mental necesaria para disfrutar de la naturaleza compartiendo con iguales esfuerzo, serenidad, libertad, soledad, aventura, caminos y peregrinación.
Las terapias para combatir el cáncer de mama plantean un reto psicológico muy fuerte tanto para pacientes como para sanitarias ¿Con qué herramientas cuentan?
Durante el largo proceso del tratamiento y sus diferentes fases transcurren varios años, periodo este durante el cual la mujer percibe la necesidad de cambiar sus parámetros de belleza personal, duda sobre su autoestima, confirma que ahora su realidad es otra y en consecuencia su escala de valores permuta el orden de sus prioridades.
Nuestra prioridad es transmitirles confianza, seguridad, acompañamiento, esperanza para revertir la adversidad en oportunidad. Las Chicas Rosas expresan siempre, en algún momento del trayecto o en el camino de vuelta cómo la enfermedad les ofrece una faceta positiva, cómo haber padecido un cáncer de mama les ofrece la oportunidad de caminar con iguales y con sanitarias para renovar su esperanza.
Las Chicas Rosas expresan siempre, en algún momento del trayecto o en el camino de vuelta cómo la enfermedad les ofrece una faceta positiva
|
¿Cómo de importante es humanizar la sanidad en este tipo de terapias?
Para la Sanidad en general y el ejercicio de la Medicina en particular, puedo afirmar que el humanismo, en su sentido más amplio, hay que trabajarlo día a día, poniendo al servicio del paciente generosidad, compromiso, cercanía y seguridad. No basta con ofrecer al paciente que nos consulta un alto nivel científico.
Cuando tu primera vivencia con una Chica Rosa es informarle del diagnóstico y del tratamiento indicado para su tipo específico de cáncer de mama y ser su cirujana, percibes su honda preocupación por las dudas que le asaltan sobre la dureza del camino que el destino le ha asignado Se hace preguntas que te traslada a ti, temiendo a veces, pero esperando siempre oír la verdad, Y tú, su cirujana, asumes con responsabilidad informarla y formarla para potenciar su seguridad y autonomía en la toma de decisiones. Mirada, palabra, silencio…establecen una vinculación afectiva que va forjando la ya descrita en la medicina helénica como
Amistad Médica.
En su caso, ya está jubilada, pero sigue al frente del proyecto ¿Es más vocación que trabajo?
Todo suma. Este paréntesis mágico que abrimos en nuestra cotidianidad pacientes y sanitarios para hacer el Camino de Santiago me permite crecer como médico y ser mejor persona.
Tras toda una carrera tratando el cáncer de mama ¿ qué consejo daría a las pacientes? ¿y a las sanitarias que deben atenderlas?
A toda señora que padece cáncer de mama le digo que es muy importante la relación de confianza con su médica. Y a las sanitarias que debemos atenderlas que nunca dejen de trabajar para consolidar esa confianza.
Más allá del propio diagnóstico y terapia ¿Cómo pueden los profesionales sanitarios mejorar su asistencia a los pacientes? ¿Qué necesitan para ello?
Una Asistencia Sanitaria de Calidad precisa disponer de tiempo. Tiempo para escuchar a la paciente, tiempo para responder a sus preguntas y clarificar sus dudas, tiempo para formación.
Para esta nueva legislatura se ha anunciado que se ampliará la edad de cribado de cáncer de mama en Andalucía ¿Cómo de importante es aumentar esta edad? ¿Somos consientes las españolas de la
importancia de estos cribados?
El cáncer de mama es un problema de Salud Pública de primer orden, por su magnitud, tumor maligno más frecuente en la mujer y por su incidencia, según la OMS cada 30 segundos se diagnostica un caso en algún lugar del mundo. Esta enfermedad de la mama, que todavía hoy, dejada a su evolución natural es tan devastadora como ya reflejaron egipcios y mesopotámicos en los documentos médicos más antiguos de los que tenemos conocimiento, aun sin conocer un tratamiento para su erradicación, si somos conscientes de la importancia de su diagnóstico temprano y para ello es imprescindible disponer de programas de cribado.
El programa de cribado del cáncer de mama en Andalucía ha salvado muchas vidas y ha mejorado la calidad de vida en otras muchas mujeres cuyo diagnóstico temprano les permitió seguir tratamientos menos agresivos. Adelantar a 40-45 años la edad del cribado con mamografía es con toda seguridad una eficiente decisión politicosanitaria.
Y sí, sí somos conscientes las españolas de la importancia del cribado mamográfico para el diagnóstico temprano del cáncer de mama. Pero también somos conscientes de la importancia de los hábitos de vida saludables entre los cuales se encuentra hacer ejercicio físico caminando. La mejor forma de Cuidarse es prevenir.
Para terminar, un mensaje para los residentes que se plantean especializarse en esta rama.
La enfermedad cáncer de mama que padece una mujer y en menor proporción un hombre requiere que sepamos realizar una correcta anamnesis y exploración clínica detenida, mantener actualizados los conocimientos en radiología, anatomía patológica, terapias medicas y quirúrgicas oncológicas, radioterapia, cirugía oncoplástica, fisioterapia, rehabilitación y cuidados enfermeros. Es decir, el cáncer de mama exige que todo un Equipo Multidisciplinar orienten al unísono qué, cuando,
cómo y por quién la paciente debe ser atendida, diagnosticada, tratada y valorado su seguimiento.
Dicho esto, mi mensaje para todo residente que su vocación le oriente hacia alguna de las especialidades esenciales para el diagnóstico y tratamiento del cáncer de mama es “No hay Enfermedades sino Enfermos”
Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.