El
Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa) se ha convertido en protagonista de uno de los movimientos más anómalos en la administración pública. La institución dependiente del Ministerio de Sanidad ha sacado a licitación un concurso público con un presupuesto cifrado en
0 euros. Lejos de las grandes cifras que suelen acompañar estos contratos, las particularidades de los servicios que se quieren contratar ha provocado que no haya ninguna contraprestación económica de por medio. Se trata de una operación para firmar la
apertura y mantenimiento de ocho cuentas corrientes en alguna entidad financiera para gestionar diferentes pagos. Pero la organización ha apostado por dar transparencia al proceso y publicarlo en la plataforma oficial de contratación.
“No supondrá coste económico alguno imputable al presupuesto de gastos del Ingesa y queda vinculado a los derechos y obligaciones de un contrato privado de apertura de cuenta corriente”, han aclarado en la memoria justificativa…
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