Este miércoles han acudido al
Ministerio de Sanidad representantes de los sindicatos mayoritarios,
CCOO y
UGT, para tratar la renovación de la
Primaria junto a personal de las administraciones públicas (nacional y autonómicas) y patronales. Y
las sensaciones no han sido buenas: los sindicatos se sienten invitados de segunda, con un documento de propuestas que
no han podido debatir en profundidad y simplemente se les permite aportar pinceladas. La inconcreción de muchos de sus puntos, quizá los más importantes, también ha influido en este desánimo, que
parece compartir más de uno. Este jueves es la última reunión de los grupos de trabajo que conformó el ministerio (dejando fuera a CCOO y UGT), sus miembros ya tienen el último borrador y lo que han visto les ha dejado fríos. Parece que
la ilusión y energías con que empezaron a trabajar se están desvaneciendo a medida que pasan los días y los puntos no se concretan, al igual que las
dimisiones de Martín Zurro y Segura Benedicto han dejado un vacío que no ha sido (ni va a ser) rellenado…
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