El nombramiento de Jesús Aguirre como
nuevo consejero de Salud y Familia de Andalucía le aleja de sus compañeros en el Senado, con los que ha compartido debates sobre la sanidad española. "Yo valoro mucho que quien asuma la responsabilidad de Sanidad tenga una
experiencia política en esa materia y Jesús la tiene. Lógicamente el proyecto político es diferente al del partido socialista y se comprobará", valora el senador socialista
José Martínez Olmos, que no escatima en honores hacia su rival político: "Es un hombre muy
trabajador, muy insistente y una persona que tiene claros sus objetivos y los trabaja. Es una persona con la que se puede debatir y discutir". Sin embargo, Martínez Olmos es consciente de las diferencias ideológicas que les separan: "Yo con Jesús siempre he trabajado y he podido llegar a acuerdos. Me gustaría que fuera capaz de no dejarse influir por los
planteamientos de Vox, algo que vemos difícil porque es quien marca la línea de este nuevo Gobierno en Andalucía".
Antonio Alarcó, senador por Tenerife y portavoz de Sanidad del PP en la Cámara Alta, destaca el reto que supone el nombramiento para su compañero: "Es una
consejería muy potente, con muchísima responsabilidad y conflictividad", destaca Alarcó, que espera que el gobierno de Aguirre en Andalucía dé sus frutos: "Lo importante es que trabajemos todos en la misma línea de forma conjunta. Los puntos más fuertes serán lo que tenga el PP a nivel nacional, como la equidad y la sostenibilidad, así como el pacto sanitario. Le deseo mucha suerte,
nos tiene a su disposición para cualquier tipo de colaboración"...
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