Llegado el día en que se hace oficial la
nueva presidencia de la OMC,
Serafín Romero ha ofrecido un breve discurso tras el
relevo al frente de la institución. Después de dar gracias por el afecto recibido en todos estos años por parte de los miembros de la OMC, sus pacientes en el cordobés pueblo de Posadas y sus padres, mujer e hijos, además de una mención especial a Jesús Aguirre, Romero ha defendido que
la etapa que comienza no es nueva, ya que seguirán trabajando en los mismos retos: el
Sistema Nacional de Salud (SNS), ya que "no vamos a permitir que se quiebre lo mejor que tenemos", los
médicos, puesto que "la precariedad va a ser nuestro campo de batalla", la
propia OMC, que "pese a las discrepancias somo un espacio de pensamiento profesional reconocido", con "muchos retos en el ámbito de la profesión", y los
ciudadanos, cuyos "intereses deben anteponerse a los profesionales". Para ello, ha agradecido
el esfuerzo de la asamblea permanente, y "aunque sea reiterativo", ha vuelto a declarar su lema de que "juntos somos más". Tras sus breves palabras, Romero ha recibido los aplausos de los presentes y el
abrazo de sus compañeros, encabezados por el ya expresidente,
Juan José Rodríguez Sendín...
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