Entre los temas que preocupan a la Casa Real están los sanitarios. Así lo demuestra la visita de la
reina Letizia a la sede de Ginegra de la Organización Mundial de la Salud, donde ha coincidido con representantes de la
sanidad de numerosos países. ¿El motivo? La inauguración de la primera
Conferencia Global sobre Contaminación del Aire y la Salud celebrada bajo la égida de la organización. La monarca ha estado bien recibida por su director general,
Tedros Adhanom Ghebreyesus, con quien mantuvo un breve encuentro. También por la directora del Departamento de Salud Pública, Medio Ambiente y Determinantes Sociales de la Salud,
María Neira. Con ambos, se ha detenido a saludar a un
grupo de niños que presentaban camisetas con el mensaje 'Respira la Vida. Niños sanos, futuro sano'. Su presencia y estos gestos, como ha explicado Neira en la apertura de sesión, contribuyen "de manera importante" a
concienciar a la opinión pública sobre la magnitud de la contaminación del aire y sus efectos devastadores en la salud, en particular de los niños. Una cuestión que, tal y como parece, también conmueve a la reina...
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