El Gobierno ha destinado más de
600.000 euros a la adquisición de nuevos aparatos de diagnóstico médico, sin embargo su destino no será ningún hospital ni centro de salud del sistema sanitario. La nueva remesa de equipos de
resonancia magnética, ultrasonidos de alta intensidad y
electroscopía de fluorescencia inducida por rayos X se ha destinado al Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), dependiente del Ministerio de Ciencia. La adjudicación tiene como objetivo “el desarrollo de terapias y monitorización neurológica con técnicas físicas múltiples” que los investigadores realizarán a través del
Instituto de Instrumentación para Imagen Molecular. Una inversión que no tendrá impacto en los pacientes actuales pero sí en la atención sanitaria del futuro…
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