Como el turrón, los villancicos o las luces de color, el
anuncio de Campofrío se ha convertido en todo un clásico de estas fechas navideñas. Sin embargo, esta vez la acogida positiva del spot
no ha sido tan unánime. Diversas asociaciones de pacientes, como la
Confederación Salud Mental España, han cargado contra el spot, considerando que “daña enormemente la imagen social de un colectivo que ha estado
históricamente maltratado y
recluido en centros psiquiátricos como el que caricaturiza este anuncio”. Las quejas han trascendido el ámbito social y han llegado a los círculos políticos. El
Grupo de Trabajo de Salud Mental de Podemos Diversidad Funcional también lo ha
criticado duramente a través de un manifiesto en el que consideran que el spot
estigmatiza al paciente de Salud Mental y
banaliza un problema de salud de profundo calado. "Contrarrestra todos nuestros esfuerzos en la lucha contra la
discriminación social que padecemos diariamente", asevera la fuerza política en un comunicado. ¿Se traducirán estas acciones en alguna
declaración por parte de los líderes del partido morado? ¿Habrá alguna propuesta para reforzar los
derechos de imagen de los pacientes de Salud Mental?...
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