El
Ministerio de Ciencia ha lanzado a consulta pública el proyecto de orden por el que se establecen las reglas y criterios de reparto de los
beneficios de explotación de las investigaciones realizadas por el
Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO). Es poca la información que el departamento de Diana Morant desprende de la iniciativa, que, en otro contexto, habría pasado como un mero trámite más de no ser porque la organización científica se encuentra en el foco de la polémica debido a la trascendencia de supuestas irregularidades económicas.
De hecho, el patronato del CNIO ha tumbado este mismo martes sus cuentas de 2025 a la espera de que se dé una “explicación exhaustiva” de la situación real del centro, el más significativo de España en el campo de la
investigación del cáncer. También se ha cancelado el llamado programa
CNIO Arte, mediante el que se habría invertido casi un millón de euros en los últimos años para la adquisición de obras. Por el momento se mantiene al frente del organismo su actual directora,
María Blasco.
El caso, inevitablemente, ha traspasado los muros del Congreso, donde el PP ha solicitado la
comparecencia de la propia Morant, para que esclarezca las decisiones tomadas para dirimir responsabilidades por estas supuestas irregularidades en el CNIO. La petición ya ha sido admitida a trámite y será trasladada a la Comisión de Ciencia…
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