Pablo Casado ha decidido dar un
giro de 180 grados para intentar hacerse con la
victoria en las elecciones autonómicas y europeas de mayo. El
candidato popular ha optado por prescindir de
Teodoro García Egea y
Javier Maroto y ha confiado el
lavado de imagen a la exministra
Isabel García Tejerina y
Cuca Gamarra. La segunda es la vicesecretaria de
Política Social del Comité Ejecutivo del Partido, un cargo que le fue otorgado en
julio del año pasado y que le permitía tomar las
decisiones en materia sanitaria. En el equipo de Cuca estaba integrado
Antonio Román, secretario de Sanidad y Bienestar Social. Ahora Gamarra se enfrenta a un nuevo reto, la
coordinación de la campaña de las elecciones locales y autonómicas y el peso de resituar al PP como uno de los grandes partidos…
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