La asistencia sanitaria en la
Comunidad Valenciana recibió 392 quejas en 2016 a través del
Defensor del Pueblo valenciano. La cifra es
siete veces mayor que la de 2015 cuando esta área gestionada por la Consejería de Carmen Montón recibió 49 denuncias. Los datos forman parte del
Informe Anual del Síndic de Greuges presentado esta semana.
En términos generales, la Sanidad valenciana también ha sumado más quejas. Si en 2015 se registraron 112 reclamaciones al defensor del pueblo, el pasado año fueron 473, lo que supone un aumento del 322 por ciento. Por áreas, además de la
asistencia sanitaria, reclamaciones y farmacias completan el podio, aunque lejos de la primera, con 29 y 13 quejas respectivamente.
Según informa el Defensor del pueblo, las quejas relativas a Sanidad tienen que ver con
demoras en la asistencia sanitaria, los retrasos en la resolución de expedientes de responsabilidad patrimonial sanitaria, la falta de información clínica, exclusión de los tratamientos de reproducción asistida, la falta de financiación de determinados medicamentos, la atención a menores en el servicio de urgencia y en las Unidades de Hospitalización Domiciliaria, la problemática de las tarjetas sanitarias a transexuales, la atención complementaria a personas con necesidades especiales en periodos de hospitalización, salud mental o el abastecimiento de vacunas.
Con todo, el 52 por ciento de las quejas que recibió el Síndic en 2016 están relacionadas con
políticas sociales en materia de educación, servicios sociales, sanidad, infancia, vivienda e igualdad. Por otra parte, el defensor del pueblo destaca que el 77 por ciento de las quejas presentadas ante el Síndic se soluciona de forma favorable para la ciudadanía.
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