La
Conselleria de Sanidad ha aprobado el
Plan Integral de Auditoría e Inspección Sanitaria 2025-2027, un ambicioso proyecto que busca garantizar la calidad asistencial y el cumplimiento normativo en la Comunitat Valenciana. La nueva estrategia refuerza el control en centros de salud, farmacias, hospitales y servicios sanitarios privados, además de incorporar
herramientas digitales para optimizar la supervisión.
La resolución, publicada en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana este viernes, establece un marco de acción dividido en
ocho planes, veintitrés áreas y cien programas de auditoría e inspección. Entre sus principales novedades destacan el uso de tecnología para mejorar la recopilación de datos, la optimización de recursos y el refuerzo en la protección de los derechos de los pacientes.
El plan intensifica la inspección en hospitales, urgencias, centros de reproducción asistida, hemodiálisis y listas de espera quirúrgica, verificando
que los servicios cumplan los estándares sanitarios exigidos. También se revisará el funcionamiento de centros sanitarios que colaboran con universidades y aquellos que operan mediante concesión administrativa.
En
salud mental y adicciones, se incrementará la vigilancia sobre centros sin autorización y se evaluará la calidad de la atención en los recursos asistenciales públicos y privados.
El sector farmacéutico será otro de los focos clave, con la inspección de oficinas de farmacia, recetas oficiales y dispensación de medicamentos en hospitales y residencias de mayores. También
se endurecerá el control sobre el uso ilícito de fármacos, la facturación de recetas y la
captación fraudulenta de datos clínicos en farmacias.
Vigilancia en compras directas de medicamentos
Además,
se fortalecerá la supervisión de la adquisición de medicamentos de compra directa por hospitales y la distribución de fármacos veterinarios y cosméticos, asegurando el cumplimiento de la normativa europea.
El plan amplía la auditoría en establecimientos alimentarios, mataderos, piscinas públicas y abastecimientos de agua, además de reforzar la vigilancia en riesgos químicos y biocidas en entornos laborales.
La inspección de la incapacidad temporal en trabajadores públicos y privados se reforzará en colaboración con la Seguridad Social y las mutuas, con el objetivo de optimizar la gestión de bajas laborales.
Para coordinar todas estas acciones, se ha creado además la
Oficina Autonómica de Auditoría e Inspección Sanitaria, que garantizará la transparencia, eficiencia y equidad en el sistema de salud valenciano.
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