Puig: "Ni el mercantilismo ni el nacionalismo de vacunas son una opción"

Nadie está a salvo hasta que todos estén a salvo. Por eso, el presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, urgió ante la atenta mirada de toda Europa a revisar el sistema actual de patentes para lograr una vacunación universal rápida que "acabe con el drama humano y económico" de la pandemia. Y así lo ha defendido también en una entrevista con Redacción Médica, en la que ha recalcado que, en un escenario de falta de vacunas contra el Covid-19, como ha sucedido hasta ahora, “el acceso no puede estar determinado por el poder adquisitivo de cada territorio o por intereses estrictamente comerciales”.

“Ni el mercantilismo de vacunas ni el nacionalismo de vacunas son opciones éticas en estos momentos”, asegura con firmeza el presidente, quien acusa una falta de ética y pragmática a nivel internacional a la hora de tomar decisiones contra la pandemia y, concretamente, en todo lo relacionado a la producción y acceso a las vacunas.

Puig se muestra firme en sus palabras y aboga por la más plena y sincera solidaridad para formar un frente común contra una enfermedad que afecta a todos los países del mundo. Y por eso insiste en que “no debemos ser indiferentes al sufrimiento de otros países ni tampoco podemos permitirnos que grandes áreas se conviertan en potenciales fábricas de mutaciones que amenacen a sus ciudadanos y a todo el planeta”.

Una situación tan excepcional como una pandemia global “exige recurrir a opciones imaginativas, extraordinarias y de emergencia”. Y, a su juicio, el actual sistema de patentes no puede ser un obstáculo a “la única salida de esta pandemia: una vacunación universal y rápida". “Hay millones de vidas en juego”, asevera el presidente valenciano.

Por todo ello, considera necesario la búsqueda de soluciones que permitan revisar los mecanismos de protección intelectual y de patentes, y sirvan para acelerar la producción de vacunas y el ritmo de inmunización de la población. Puig es claro: “La suspensión temporal de las patentes relacionadas con las vacunas de la Covid-19 podría ser una solución”. Y matiza que “sería, en todo caso, una medida puntual y limitada”.

“Soy muy consciente de la importancia que tiene la protección de la propiedad intelectual como incentivo a la investigación"

Ante este posible escenario, por lo general, la industria farmacéutica ha rechazado la liberación de patentes de vacunas. Así, la Federación Internacional de Asociaciones de Fabricantes de Productos Farmacéuticos (Ifpma, por sus siglas en inglés) ha alegado recientemente que la renuncia a las patentes de las vacunas contra el Covid-19 "no aumentará la producción ni proporcionará las soluciones prácticas necesarias para combatir esta crisis sanitaria mundial".

Es por este motivo que, ante la respuesta negativa de la industria, Puig explica que su propuesta “en absoluto supone una enmienda a la totalidad al sistema de patentes”. “Soy muy consciente de la importancia que tiene la protección de la propiedad intelectual como incentivo a la investigación, y las innovaciones farmacéuticas alcanzadas gracias a ello”, asegura.

No obstante, entiende que también podrían ser válidas otras medidas, como las licencias obligatorias, compensando económicamente a los laboratorios que son titulares de los derechos de las patentes, o pedir e incentivar la colaboración entre las empresas farmacéuticas, de forma que aquellas que tengan la capacidad técnica puedan elevar la producción global.

En paralelo, el presidente valenciano argumenta que se debería reducir “nuestra dependencia de instalaciones en terceros países e incrementar la capacidad de producción de medicamentos”. Y, también a medio plazo, "mejorar el acceso a los materiales para fabricar las vacunas y en crear conocimiento en todos los procesos relacionados con la investigación, el desarrollo y la distribución de vacunas y medicamentos".

Por último, Puig zanja en esta entrevista con Redacción Médica que “el desafío que tenemos ante nosotros es enorme: una vacunación lo más rápida posible para acelerar la inmunización de la población y salvar vidas”.