Alberto Martínez debuta como consejero prometiendo una Osakidetza "cercana"

“Solo una Atención Primaria fuerte puede garantizar una asistencia sanitaria de calidad”, así lo ha afirmado el nuevo consejero de Salud de Euskadi, Alberto Martínez, durante su primer acto público. El lugar elegido para intervenir por primera vez ante los medios de comunicación tras su designación ha sido el Ambulatorio de Repelega, el que le corresponde al propio consejero.

La visita al centro no ha sido casualidad. Según ha manifestado, la decisión de estrenar su agenda pública con este acto en un centro de Atención Primaria y reunirse con su equipo de profesionales “pretende ser una declaración de intenciones”. Además, ha asegurado que es un símbolo de su compromiso con “una Osakidetza sólida y cercana a las personas”.

Para el nuevo consejero, “la Atención Primaria es el músculo del sistema de salud vasco”, ya que “estamos hablando de un ámbito donde se resuelven 8 de cada 10 patologías”. También se ha comprometido a trabajar “desde la escucha y el diálogo”, algo que ya avanzó Imanol Pradales, el nuevo lehendakari de Euskadi, durante su investidura. 

Un nuevo consejero “comprometido” con la sanidad pública

El pasado 22 de junio tuvo lugar el traspaso de competencias en la Consejería de Salud vasca. En ese momento, Alberto Martínez, jefe de Servicio de Anestesiología, Reanimación y Terapia del Dolor del Hospital Universitario de Cruces (Bilbao), fue nombrado nuevo consejero de Salud.

Entre sus objetivos de futuro para Osakidezta, tal y como anunció Pradales, destacan la reducción de listas de espera, el refuerzo de la Atención Primaria y el aumento de 2.000 nuevas ofertas públicas de empleo. Los sindicatos tienen las esperanzas puestas en Martínez ya que, según afirmó Arantza Agote, responsable de Servicios Públicos de UGT en Euskadi, “sé de primera mano que cree en la sanidad pública”.