"La Enfermería vasca debe experimentar un aumento en sus funciones"

El último portavoz sanitario escogido por su partido en el Parlamento vasco ha sido Ekain Rico, que defenderá las políticas en materia de sanidad del Partido Socialista de Euskadi. Su grupo parlamentario irá de la mano con el Partido Nacionalista Vasco para conseguir mejorar los servicios de Osakidetza.

Licenciado en Derecho por la Universidad de País Vasco, la nueva voz sanitaria del PSE es especialista universitario en Salud, Dietética y Nutrición. Abogado de profesión, comenzó su andadura en el Parlamento Vasco en el año 2020, etapa en la que formó parte de varias comisiones como la de Instituciones, Gobernanza Pública y Seguridad o la de Reglamento y Gobierno, aparte de ser vocal de la Comisión de Salud.

Antes de dar el salto a la Cámara autonómica, fue portavoz del Grupo Juntero Socialista en las Juntas Generales de Bizkaia. Actualmente es secretario general del Grupo Parlamentario Socialista Vasco, cargo que ha compatibilizado con la Secretaría de Política Institucional del PSE-EE de Bizkaia.

Desde el Gobierno autonómico son conscientes de que la situación de Osakidetza no es buena, y el principal objetivo del pacto PSE-PNV es convertir el sistema público de salud vasco en lo que era. Para ello, el PSE propondrá poner el foco en la estabilización del personal sanitario, en el diseño de medidas para la retención de los MIR que acaben su periodo formativo y en hacer más atractivas las condiciones laborales de los sanitarios.

Desde el punto de vista del Gobierno vasco y del Partido Socialista de Euskadi, ¿cuál es la situación actual de Osakidetza?
 
La situación de Osakidetza no es buena. De hecho, una de las prioridades de este Gobierno tiene que ser precisamente devolver a Osakidetza a los altísimos estándares de calidad a los que estamos acostumbrados en la salud pública vasca. Creo que la pandemia ha afectado a todos nuestros sistemas públicos de salud.
 
Es verdad que si comparamos el sistema público vasco de salud con los sistemas de otras comunidades autónomas, estamos bastante mejor, pero nos tenemos que comparar con los estándares que en Euskadi hemos tenido siempre. Evidentemente, la ciudadanía nota que ha habido un empeoramiento en la calidad de los servicios y en los tiempos de espera. Esto no es una percepción, es una realidad.
 
Evidentemente, nuestro objetivo en esta legislatura es poner los mimbres a través de un pacto de salud para poder recuperar esa gran calidad asistencial e incluso seguir mejorando. No nos conformamos con recuperar lo que teníamos, ya que tenemos que ir a más.
 
En cuanto al Pacto de Salud planteado por el lehendakari y el consejero Alberto Martínez, ¿qué papel ha tenido el PSE en esta iniciativa?
 
Toda. De hecho, la iniciativa no es ni del lehendakari ni del consejero. Está recogida en el acuerdo de gobierno que firmamos el Partido Socialista y el Partido Nacionalista Vasco. De hecho, he sido uno de los negociadores de dicho pacto. Y sí, precisamente, se va a llevar a cabo porque está en ese acuerdo.
 
Es evidente que para nosotros el diálogo era muy importante. En nuestro programa electoral, el ámbito de salud era el que más ocupaba el programa electoral y no era una coincidencia. Es porque sabíamos que era una de las preocupaciones más fundamentales de la ciudadanía y durante todos estos años de la pasada legislatura lo hemos venido diciendo.

"La iniciativa del Pacto de Salud Vasco no es ni del lehendakari, ni del consejero, la recogía el acuerdo PSE-PNV"

 
Somos muy conscientes de que las organizaciones que necesita Osakidetza requieren también de diálogo. Diálogo con los profesionales, pero también con el resto de fuerzas políticas y con las propias fuerzas sindicales.
 
En abril aseguraron que la Sanidad sería un punto clave para llegar a un acuerdo con el PNV, ¿qué medidas vieron fundamentales para llegar al pacto PSE-PNV?
 
En nuestro programa electoral la sanidad era muy importante y ocupaba buena parte de su contenido. Sin embargo, en el programa del PNV, si no recuerdo mal, eran tres páginas. En el acuerdo de gobierno son muchísimas más páginas. Es una de las partes con mayor extensión.
 
Lo que hemos hecho ha sido incluir todas esas medidas que los socialistas y las socialistas hemos puesto en nuestro programa electoral, porque sabemos que son las recetas necesarias para curar el estado de nuestra salud pública. Tenemos muy claro que, en primer lugar, necesitamos más profesionales en el ámbito sanitario.
 
Una de las cuestiones que recogemos es el incremento de la plantilla estructural e incluso la incorporación de al menos 2.000 profesionales más a lo largo de toda la legislatura. El diálogo es fundamental para incorporar a los propios profesionales de nuestra sanidad pública en las necesidades de Osakidetza.
 
Hemos otorgado también un factor muy importante en el ámbito de la cronicidad. Es necesaria una revisión absoluta de cómo se prestan los servicios sanitarios. Pensamos que el ámbito sociosanitario tiene que ser entendido en su conjunto.

"Tiene que haber una unificación del servicio social y sanitario"

Tiene que haber una unificación del servicio social y sanitario, es decir, deben ir de la mano. Todo ello debido a la pirámide poblacional que tenemos, ya que cuanta más edad tiene una población, mayor demanda hay de servicios sanitarios y sociales.
 
Nosotros no solamente queremos recuperar los altos estándares de calidad que tiene Osakidetza, abordando la situación en la Atención Primaria, ya que ha habido una gran ampliación de las esperas que tiene que sufrir la ciudadanía; sino que somos conscientes de que para hacer frente a eso, con el número de personas que trabajan en Osakidetza en la actualidad, no es suficiente. Necesitamos reforzar esos servicios.
 
También estamos muy volcados en el hecho de tener que explorar la dimensión de las profesiones sanitarias. Creemos que, por ejemplo, en el ámbito de la Enfermería podemos abordar una extensión de sus funciones, pero esto también requiere diálogo permanente precisamente con ese sector.
 
¿Desde el Gobierno vasco se plantean presentar algún recurso respecto a la homologación de títulos universitarios extranjeros? ¿Cuál es la situación actual?
 
En la pasada legislatura hemos modificado nuestra normativa para permitir que en determinadas situaciones de escasez se pueda acceder al ámbito de la función pública sin necesidad del requisito de nacionalidad española. Es algo que permitió la Ley Sanitaria, la Ley de Función Pública, y que las diferentes comunidades autónomas han ido incorporando.
 
Nosotros nos sumamos a mediados de la pasada legislatura a ese tipo de actuaciones y, de hecho, ya se han ido contratando profesionales extracomunitarios que tienen la titulación convalidada. Evidentemente, esta es una cuestión que está judicializada y lo único que creo que todos podemos desear es que los tribunales tomen la decisión que tengan que tomar lo antes posible para clarificar cuáles son las posibilidades que podemos tener para incorporar a este tipo de profesionales también a nuestra sanidad. La homologación, al final, acredita que estos profesionales están perfectamente preparados y tienen la homologación de sus títulos con los títulos europeos.
 
Uno de los puntos de su programa electoral ponía el foco en fomentar la farmacia comunitaria en el sistema de salud vasco, ¿cómo lo conseguirán?
 
Cuando mantuvimos reuniones con ciudadanos o con profesionales del ámbito farmacéutico para elaborar el programa electoral hubo una serie de cuestiones que nos llamaron la atención. En primer lugar, creo que si hablamos de un concepto de salud pública y de la necesidad de integrar el aspecto sociosanitario, las farmacias son claramente un agente de salud y sociosanitario que permite el control de ver si efectivamente se está llevando a cabo una correcta administración de la medicación. Incluso pueden ser un faro de alerta ante situaciones sanitarias que aconsejen un ámbito de actuación por parte de la Administración.

"Las farmacias pueden llegar a ser un faro de alerta ante situaciones sanitarias"

 
Por ello, pensamos que la farmacia en general puede desarrollarse más como ese ámbito de agente sociosanitario en relación a los gobiernos. También nos llama la atención que en Farmacia Hospitalaria muchos ciudadanos que tienen un tratamiento largo en el tiempo tienen que acudir al centro hospitalario para que les den nuevas dosis de ese medicamento. Habría que explorar la posibilidad de que lo puedan recibir en su farmacia de cercanía, evitarles ese viaje que, como he dicho en muchas ocasiones, en algunos casos, son personas con determinadas edades.
 
Sería bastante más cómodo utilizar un sistema que con toda la seguridad del mundo, como puede ser aquella que establezca la relación entre un hospital público y una farmacia, pueda llevar el control necesario. Estamos dispuestos a explorar esos ámbitos porque creemos que pueden ser, por un lado, más cómodos para la propia ciudadanía y, en segundo lugar, le pueden permitir a la Administración contar con un agente de salud pública más pegado al terreno.
 
Uno de los problemas que plantean la mayoría de partidos en Osakidetza es la temporalidad que existe entre el personal sanitario y el problema en el servicio de Emergencias, ¿qué medidas pondrán encima de la mesa para conseguir una mayor estabilidad laboral y acabar con el problema en dicho servicio?
 
Para acabar con la temporalidad solamente hay una opción, OPEs. Por lo tanto, oferta pública de empleo y mayor plaza estructural, y eso lo tenemos claro. No existen otras vías, es decir, cualquiera que plantee otra cuestión se estará equivocando y nosotros sabemos muy claro que la receta es esa.
 
Respecto al servicio de Emergencias, es verdad que ha habido numerosos problemas. Estos equipos dependen de la disponibilidad de los médicos de Atención Primaria, de Familia y Comunitaria, y es una de las especialidades con más carencia en Osakidetza en estos momentos.

"Medicina Familiar y Comunitaria es una de las especialidades con más carencia en Osakidetza"

Además, hay que tener en cuenta que en verano se junta con los momentos en los que los profesionales sanitarios cogen vacaciones. La única forma de que desaparezca la mala situación es la contratación de más personal. Y ahí entra con mucha fuerza el personal extracomunitario, porque sabemos que existen en estos momentos importantes deficiencias en algunas especialidades sanitarias, como puede ser Medicina Familiar y Comunitaria, pero en algunas más en el ámbito de las universidades españolas.
 
Sabemos que no hay suficientes médicos en formación que todavía necesitamos, que tiene mucho que ver con los detrimentos de oferta de Medicina especializada que los gobiernos del Partido Popular hicieron hace 10 años. Ahora se están revirtiendo, pero formar a un médico nos lleva 10 años.
 
¿Cómo piensa que va a ser la relación entre Gobierno y sindicatos y colegios profesionales?
 
Pues yo creo que va a ser buena. El Pacto de Salud es un cambio de actitud en el Departamento de Salud importante con respecto a la pasada legislatura. Los últimos cuatro años llamé a ese diálogo en más de una ocasión. Objetivamente, esa necesidad de diálogo que nosotros hemos trasladado al acuerdo de gobierno ha sido recogida por el nuevo consejero. Y creo que esa primera reunión del Pacto de Salud que tuvimos en inicios de septiembre es una prueba de ello.
 
Tenemos que seguir explorando conjuntamente con todos los sectores sociales, con los sectores políticos, la Osakidetza que queremos y qué es lo que tenemos que hacer para conseguirla. Así que estamos abocados a entendernos si lo que queremos de verdad todos es conseguir la mejor Osakidetza posible.