El pasado viernes 19 de enero el Gobierno de Navarra anunciaba un
acuerdo con EH Bildu para la aprobación de los próximos presupuestos generales de la Comunidad Foral para este 2024. Desde el Ejecutivo regional argumentaron que el
pacto traería “estabilidad” a la comunidad, y, tal y como recoge el documento firmado por las dos partes, el Gobierno de María Chivite y la coalición abertzale han pactado seis puntos para que los
Laura Aznal, líder de Bildu en el territorio, voten ‘sí’ a las cuentas del Ejecutivo. Así, el Departamento de Salud se compromete a realizar un estudio que analice las
derivaciones de pacientes de Osasunbidea a la sanidad privada, con la intención de reducir dichos desplazamientos a “un mínimo del
5 por ciento anual”.
“En el último acuerdo presupuestario no se llevó a efecto el estudio al que se comprometió realizar el Gobierno, por eso se adquiere el compromiso de realizarlo en el
primer semestre de 2025 con los datos recogidos durante este año”, se lee en el
documento del acuerdo. Y es que, tal y como estipulan ambas partes, el análisis de las derivaciones tratará de clarificar su
causalidad, como, por ejemplo, si existe una
falta de recursos humanos en el Sistema Navarro de Salud para atender “toda la demanda”, si el sistema cuenta con
camas hospitalarias suficientes para “absorber la actividad quirúrgica” o si la sanidad autonómica necesita
dispositivos tecnológicos para “cumplir” con la Ley Foral de Garantías de Espera.
“La realización de este estudio se considera para poder realizar un
diagnóstico de los déficits del
SNS-Osasunbidea y las posibles soluciones o
alternativas a implementar para reducir o eliminar derivaciones a la sanidad privada”, argumentan las partes en el acuerdo. El Gobierno de Navarra ha estado “unas semanas” en conversaciones con Bildu, que ha finalizado con un pacto que, tal y como han enfatizado desde el Ejecutivo, “se configura como un amplio texto que aborda las prioridades, en todas las áreas, que el Ejecutivo de Navarra se ha marcado como fundamentales en su
acción de Gobierno”.
Trasplantes renales en el Hospital Navarra
Otro de los puntos acordados es la realización de un estudio que analice la posibilidad de
llevar a cabo los trasplantes renales de adultos en el Hospital Universitario de Navarra. El Gobierno autonómico se ha comprometido, así, a valorar los costes y beneficios de
crear una unidad de trasplantes renales en el complejo asistencial, justificándose en que la Comunidad Foral ha sido una de las regiones con
“mayor tasa de donación de órganos” que han dado lugar a un total de
114 trasplantes durante el 2022. De ellos, 69 fueron renales, por lo que el Ejecutivo y Bildu han pactado explorar esta posibilidad para fortalecer esa atención en Osasunbidea.
Otra de las promesas firmadas es la realización de un estudio epidemiológico durante el año 2025, con los datos recogidos en este 2024, sobre la eficacia y eficiencia preventiva de las actuaciones sancionadoras de la
Inspección de Trabajo y las asesoras del Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra (
Ispln). Además, para antes de diciembre del próximo año, el Ejecutivo de Chivite también tendrá que llevar a cabo un análisis sobre la
efectividad de tratamientos de uso hospitalario que generan mayor gasto. Es decir, que el Departamento de Salud tendrá que valorar su efectividad, así como observar los efectos secundarios, las alternativas de gasto y el coste marginal.
Circuitos rápidos de diagnóstico y Atención Primaria
Otro punto importante del acuerdo es el referido a la implantación de los
circuitos rápidos de diagnóstico y tratamiento en el Hospital de Navarra. “En estos momentos es necesario estudiar la instalación de centros de alta resolución”, explican Gobierno y Bildu en el texto, recalcando que son infraestructuras capaces de “resolver determinados procesos sanitarios predefinidos, frecuentes y poco complejos en
tiempos mínimos, de forma que todas las pruebas y consultas necesarias para el diagnósticos o tratamiento se realicen simultáneamente en un proceso de
atención de 24 horas".
Y, por último, el texto recoge el sexto acuerdo cerrado entre el Ejecutivo Foral y Euskal Herria Bildu. Se trata, concretamente, de analizar la articulación de dispositivos organizativos en el
primer nivel asistencial navarro de ámbito poblacional superior al de la zona básica de salud e inferior al de área sanitaria. Las partes consideran que dicha estrategia permitirá “mejorar el
empoderamiento” de los profesionales sanitarios, pues les darían “mayor
capacidad de resolución de problemas”, y abordar, así, los determinantes sociales de la salud de cada grupo de las zonas básicas sanitarias.
“Es preciso llevar adelante un diseño de futuro de los dispositivos de distrito para la
Atención Primaria de Navarra, que abra un proceso participativo de planificación estratégica que lo desarrolle”, define el texto, que apunta al 30 de junio del 2025 para tener concretado dicho informe. No obstante, desde Bildu remarcan que los
4,2 millones de euros que tendrá su grupo parlamentario para presentar enmiendas serán para “todos los departamentos”. “Los distribuiremos según la prioridad y la urgencia”, subraya a este diario
Txomin González, portavoz sanitario de la coalición en la cámara navarra. “Tenemos varios proyectos para presentar como enmiendas, pero algunos los compartimos con otros grupos políticos. Todavía seguimos negociando”, concluye el parlamentario abertzale.
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