El 9,4 por ciento de los profesionales sanitarios de Navarra, de media, ha desarrollado anticuerpos frente al Covid-19, según los resultados de la segunda fase del Programa de seroprevalencia entre profesionales sanitarios y sociosanitarios (Seprosana), un trabajo llevado a cabo el pasado noviembre por el Gobierno de Navarra y único en el Estado, y que redunda en la apuesta estratégica de proteger a los y las trabajadoras de estos ámbitos.
Sin embargo, si desglosamos el dato anterior por profesiones sanitarias -con un 70 por ciento de la plantilla inscrita (9.286 personas) en el Seprosana-, este porcentaje se incrementa en el caso del personal directivo y de las jefaturas, pues un 9,87 por ciento cuenta con anticuerpos contra el coronavirus. Solo son superados, por el personal de Enfermería, con un 9,91 por ciento. Mientras, en el resto de colectivos la distribición es la siguiente: medicina (9,21 por ciento), celadores (8,84 por ciento), administración (8,25 por ciento), trabajo social (7 por ciento), otros profesionales (7 por ciento) y todo el personal técnico asistencial (6,87 por ciento).
El personal ha valorado positivamente el sistema y las tasas de participación se han mantenido en niveles elevados, inscribiéndose 15.272 profesionales. Las conclusiones han sido presentadas este martes en el Consejo navarro de Salud a los distintos colegios profesionales y sindicatos.
Las cifras de seroprevalencia en esta segunda fase –en la primera, realizada en junio, fue del 7,2 por ciento- revela que los profesionales sanitarios han desarrollado unos porcentajes similares de anticuerpos a los de la población general, según el estudio ENE-COVID del Gobierno Central, un dato que enfatiza el trabajo de protección de los profesionales navarros, así como su responsabilidad a la hora de garantizar las medidas preventivas frente al virus.
Incremento en los valores de seroprevalencia
En pleno arranque del proceso de vacunación en el ámbito sanitario, la inmunización registrada por las dos fases del estudio incide en la necesidad de protección que la vacuna puede proveer a esta población. El ligero incremento en los valores de seroprevalencia constatado entre Seprosana 1 y 2 –del 7,2 por ciento al 9,4 por ciento- se considera acorde con la evolución epidemiológica.
En cuanto a la estrategia, para las pruebas de esta segunda fase se inscribieron 15.272 profesionales de una población potencial de sanitarios y sociosanitarios de en torno a 23.000 personas, realizándose un total de 14.562 serologías, con una participación del 95 por ciento de los apuntados. En esa línea, el dato supone aproximadamente el 75 por ciento del personal sanitario y sociosanitario de Navarra.
Respecto al personal de la red sanitaria privada, el 12 por ciento de los 1.965 profesionales que participaron ha desarrollado anticuerpos, frente al 7,8 por ciento registrado en la primera ronda del estudio. Por centros, el 11,3 por ciento de la plantilla de la Clínica Universidad de Navarra (CUN) ha tenido contacto con el virus, dato que en el hospital San Juan de Dios (HSJD) llega al 17,81 por ciento. En la clínica Josefina Arregui, el porcentaje es del 6,52 por ciento. Los datos de esta segunda fase relativos a la Clínica San Miguel están aún pendientes de incorporar.
En las 200 pruebas realizadas al personal del Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra (ISPLN), el porcentaje de profesionales con anticuerpos es del 7,1 por ciento, frente al 3 por ciento de la primera ronda de Seprosana. En cuanto a los datos en el Departamento de Salud y Navarrabiomed, con una participación del 93 por ciento (101), la seroprevalencia experimenta un ligero descenso con respecto a junio, pasando del 9,9 por ciento al 8,9 por ciento. Entre el personal de contratas inscrito (915, el 90 por ciento), por su parte, el 11,9 por ciento ha desarrollado anticuerpos, frente al 4,7 por ciento de la primera fase.
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