Redacción. Pamplona
La Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Navarra ha decidido no suspender cautelarmente la OPE en Educación y Salud –tal y como pedía la abogacía del Estado– al entender que la suspensión “ocasionaría mayores perjuicios a los terceros interesados, quienes verán retrasada sus expectativas de acceder a los puestos ofertados, a lo que debe sumarse el interés público de que se cubran determinadas plazas en la Administración foral”.

El consejero de Sanidad, Fernando Domínguez.

La abogacía del Estado presentó ante la sala de lo contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Navarra un recurso frente al Decreto Foral 20/2015 por el que se aprobó la OPE de la comunidad foral correspondiente a los años 2013, 2014 y 2015. Según fuentes del Departamento de la Función Pública navarro, el recurso sólo afecta a parte de la OPE, concretamente las plazas correspondientes a 2013, que fueron recurridas por un defecto de forma.

Basándose en esto, el Gobierno navarro ha recurrido la suspensión cautelar; recurso que el TSJ ha estimado favorablemente. La OPE–aprobada, pero sin fecha de celebración aún– incluía 210 plazas en Sanidad. Según fuentes del ejecutivo foral, el paso a seguir ahora sería restar a esta oferta las plazas impugnadas por el Gobierno, una treintena, correspondientes a 2013.

Los argumentos que sostiene el Estado para recurrir la OPE de 2013 son cuestiones de plazo legal y discrepancias en torno al número de plazas que se podían sacar a concurso, que en ese período estaban limitadas por la llamada “tasa de reposición” por la que sólo se permitía sacar a concurso un 10% de las plazas vacantes de Educación y Salud.

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