Vacunas Covid a 350 dosis/hora para ganar "el partido de nuestras vidas"

La casa del Atlético de Madrid, el estadio Wanda Metropolitano, ha vuelto a abrir sus puertas, aunque esta vez no ha sido al público que acude a apoyar los pupilos del Cholo Simeone sino a los policías locales, bomberos y efectivos de Protección Civil. Para ellos, el 25 de febrero será una fecha grabada en sus mentes con tinta indeleble, el día que recibieron la primera dosis de la vacuna contra el Covid-19 y que supuso el inicio de la campaña de vacunación masiva en la Comunidad de Madrid, lo que para estos miles de trabajadores públicos de servicios esenciales ha sido el primer paso para dejar atrás los horrores causados por la pandemia.

Desde primera hora de la mañana, miles de profesionales han guardado cola con la esperanza de lograr la tan ansiada inmunización. Hay policías locales llegados de todas las partes de Madrid: Pozuelo de Alarcón, Móstoles, Torrejón de Ardoz o Leganés. Lo mismo ha sucedido con los bomberos y los miembros de Protección Civil. En el ambiente hay optimismo y se respira la esperanza de un nuevo futuro sin coronavirus.

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En esta ocasión, los vomitorios del estadio no se han llenado de hinchas buscando ocupar su sitio en la grada. En vez de los habituales puestos de comida, el Summa 112, encargado de organizar el despliegue para la vacunación en el Wanda Metropolitano, ha instalado ocho puntos de vacunación dobles que tienen vistas al césped rojiblanco.

El Summa 112 prevé alcanzar una velocidad de crucero de 350 vacunas/hora

Juan Carlos García, uno de los coordinadores, explica a Redacción Médica que el objetivo este jueves ha sido llegar a los 1.200 vacunados para (a un ritmo de 350 vacunas/hora), posteriormente, acelerar el ritmo de vacunación hasta alcanzar la velocidad de crucero de unas 10.000 dosis por día y "ganar el partido de nuestras vidas". Para conseguir esta meta, se han desplazado hasta el estadio a 40 profesionales, de los que 17 son personal de Enfermería, 10 técnicos de emergencia, 7 celadores, 2 médicos, 3 informáticos junto a supervisores y responsables de este dispositivo.

El proceso es similar al de cualquier proceso de vacunación y al que ya se está desarrollando en el Hospital Isabel Zendal. Los efectivos de los cuerpos de seguridad y emergencias acuden de manera escalonada y mediante cita previa vía SMS. Posteriormente, van entrando por las puertas de acceso habilitadas, en donde son identificados mediante su DNI en los dos puntos de filiación que se han montado. Además, las enfermeras les preguntan si tienen algún tipo de alergia o en qué brazo quiere que se le ponga la inyección.

Tras el registro, son citados en uno de los puestos de vacunación, que en total superan la decena, y en cuestión de segundos reciben la vacuna. Acto seguido, el paciente pasa por un punto de control en el que los profesionales del Summa 112 fijan una hoja de ruta de la dosis mediante el registro del número de lote, entre otras cosas. Así, se le hace esperar sentado durante unos 10 o 15 minutos para comprobar que el pinchazo no provoque algún tipo de dolor, mareo u otro contratiempo. Por si algo de esto sucediera, se ha preparado un soporte vital avanzado con dos carros de parada y una UVI móvil.

Policías locales, bomberos y efectivos de Protección Civil no serán los únicos en pasar por el estadio. Durante los próximos días, también se citará aquí y en el hospital de Isabel Zendal a los 110.000 docentes de entre 18 y 55 años. Ambos colectivos, y siguiendo las pautas establecidas por el Ministerio de Sanidad, son inoculados con la vacuna de AstraZeneca. Sus horarios de vacunación serán de lunes a domingo de 9.30 a 14.30 horas y por la tarde de 15.30 hasta las 20.30 horas.

Así, como ha dicho este mismo jueves la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, durante la visita al presentación del punto de vacunación masivo Covid-19 en el estadio Wanda Metropolitano e inspirándose en la filosofía del Cholo Simeone del 'partido a partido', contra el coronavirus hay que ir "vacuna a vacuna".