Susana Monereo, jefa del Servicio de Endocrinología del Gregorio Marañón.
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Redacción. Madrid
El Hospital General Universitario Gregorio Marañón ha sido el primer centro de España que ofrece la ablación por radiofrecuencia para el tratamiento de los nódulos tiroideos, según asegura el centro. Este tratamiento está diseñado inicialmente para abordar los nódulos tiroideos predominantemente sólidos, benignos pero sintomáticos, es decir, aquellos que sin ser cancerígenos presentan síntomas como molestias al tragar, respirar, cambios en la voz, molestias locales y gran tamaño visible. También aquellos que funcionan en exceso, lo que supone mayor riesgo de osteoporosis y arritmias.
El Hospital Gregorio Marañón ya ha incluido esta técnica en la práctica clínica y todos sus pacientes han evolucionado de forma muy favorable. La ablación térmica por radiofrecuencia se realiza con anestesia local, de forma ambulatoria y en una sola sesión. Los pacientes experimentan entre los cuatro y doce meses una reducción de hasta el 95 por ciento del tamaño del nódulo, desaparece la totalidad de sintomatología y permanecen eutiroideos, es decir, con las funciones normales de la tiroides.
Esta técnica, asegura el hospital, ofrece múltiples ventajas ya que evita la cirugía y por tanto los posibles problemas derivados de la misma, no se extirpa el tiroides, por lo que no afecta a sus funciones, y el proceso de recuperación es mucho más rápido ya que los pacientes pueden hacer vida normal tras la ablación.