Teresa Galindo Rubio y Jesús García García, secretaria general y secretario de Acción Sindical de Satse Madrid, respectivamente, se han reunido con los responsables sanitarios de
Ciudadanos a los que han trasladado el "perjuicio" que puede provocar la aprobación del
Proyecto de Ley de Farmacia que se debatirá en la
Asamblea a partir del mes de octubre. Para ello, les han pedido que
se abstengan en la votación.
Jesús García ha explicado les han trasladado el malestar de los
profesionales de Enfermería a la norma, ya que, a su juicio,
otorga competencias a la oficina de farmacia que ya se están desarrollando por los profesionales sanitarios de los centros de salud. Les han dicho que su aprobación "sería un torpedo en la línea de flotación de la Atención Primaria y que no deben sumarse al
proyecto privatizador del PP", así como les han pedido que se abstengan para evitar que se apruebe.
La Ley de Farmacia "afecta a miles de usuarios y a casi 40.000 profesionales del Sermas de los que 10.000 desempeñan su labor en Primaria", dice Satse. “Creo que tanto Ciudadanos como PSOE y Podemos, estos dos últimos con los que se entrevistará mañana martes, deben pensar si los madrileños están dispuestos a permitir que parte de la labor que se realiza en los
centros de salud pase a depender de las oficinas de farmacia con lo que esto conlleva,
privatización y más gasto sanitario”, ha señalado García.
Ha recordado que el sindicato no se opone a que las oficinas de farmacia desarrollen nuevas competencias, pero siempre dentro de su ámbito de actuación. El proyecto de Ley de Farmacia les otorga el desarrollo "de actividades y servicios asistenciales que determine la Consejería de Sanidad".
Dichos servicios asistenciales podrían ser el
control de la medicación y de los botiquines, la toma de tensiones, el control del azúcar, programas de detección precoz y cribado de enfermedades. Todo ello en los domicilios de los pacientes. Estas actividades, ha explicado García, "las llevamos a cabo todas las enfermeras de los centros de salud ya que se encuentran incluidas en los contratos programas que la Consejería de Sanidad nos impone".
"Una enfermera cuando acude a un domicilio lleva a cabo estos controles y muchos más cuidados. No comprendemos que si es la Consejería de Sanidad la que nos dice cuándo y cómo llevarlos a cabo porqué decide ahora que se hagan desde las oficinas de farmacia, con el coste económico que esto representará ya que cobrarán por realizar este nuevo servicio y así lo han expresado en numerosas ocasiones. La
única explicación es que quieren privatizar parte de la Atención Primaria y éste es el primer paso hacia ello. El siguiente será cerrar
consultorios y centros de salud con el argumento que sus funciones las realizan ya las oficinas de farmacia y sobran
profesionales sanitarios", ha manifestado.
La solución, tal y como le han ciho a los representantes de Ciudadanos, es
abstenerse en la votación del Proyecto de Ley, devolverlo al Gobierno del PP "y hacer las cosas bien: sentar en la misma mesa a todos los profesionales afectados (no sólo a los farmacéuticos) y redactar un nuevo Proyecto de Ley. Por otro lado, deberían trasladar al PP la necesidad de
aumentar la plantilla enfermera de los centros de salud, deficitaria debido a la falta de OPE que sirvan para generar más empleo, no sólo estabilizarlo".
Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.