La Comunidad de Madrid ha publicado las auditorías de los centros sanitarios que mantienen una gestión bajo la modalidad de concesión administrativa; es decir, que tienen conciertos con empresas privadas para cubrir ciertos servicios no sanitarios.
En el Hospital General de Villalba no ha presentado ninguna incidencia grave de las 29 registradas; de las cuales, 12 han sido en restauración y 8 en almacenes, que son los dos servicios más afectados. Por ejemplo, se encontraron cajas de cartón dentro de las cámaras frigoríficas o algunas etiquetas de productos estaban en envases distintos a los originales. En almacenamiento, se detectaron discos adhesivos Coloplast caducados, lo que exigía la retirada inmediata de toda la mercancía caducada.
En el Hospital Infanta Elena de Valdemoro se han encontrado incidencias en la climatización de la zona de preparación de alimentos, calificando el error de crítico. También fallos en la gestión de los destinatarios de las bandejas de comida, por lo que se propone una modificación del sistema informático para solucionarlo. Por otro lado, también hay problemas con los tiempos de distribución de las bandejas de alimentos, por lo que se requiere la optimización de estas marcas.
Para el Hospital Rey Juan Carlos de Móstoles se detectaron fallos claros de seguridad al estar desactivado el sistema de huella dactilar lo que podía permitir acceder a zonas restringidas como los Controles de Accesos a Farmacia, con una simple llamada al telefonillo. Del mismo modo, cuando se realizó la auditoría, al centro le faltaba la Licencia de Funcionamiento de la Central de Esterilización que concede la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios.
La auditoría del Hospital Universitario de Torrejón reveló que si bien la limpieza de las zonas más sensibles era la correcta, las zonas de bajo riesgo requería de un mejor servicio. Más grave era la situación de los residuos sanitarios, pues los carros para su traslado no se evidenció que fueran cerrados o estaban mal cerrados. Respecto a la licencia de la Central de Esterilización, el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad todavía no la había concedido, aunque sí solicitado. En los almacenes, por otra parte, los materiales más sensibles no estaban almacenados con todas las medidas de seguridad deseables, lo cual se considera una incidencia crítica.
ENLACES RELACIONADOS:
Auditoría de calidad del Hospital General de Villalba.
Auditoría de calidad del Hospital Infanta Elena.
Auditoría de calidad del Hospital Rey Juan Carlos.
Auditoría de calidad del Hospital Universitario de Torrejón.
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