La Justicia restituyó al jefe de la UCIP de La Paz al "ser la mejor opción"

El jefe de la Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos (UCIP) del Hospital Universitario La Paz se defiende en el conflicto laboral que ha vuelto a resurgir en el seno de su equipo tras volver al puesto de trabajo. El responsable, reincorporado en su cargo por la Justicia tras ser relevado del puesto por la Dirección del centro hace casi tres años, considera que las bajas laborales por motivos de salud de siete de los 15 médicos de la UCIP que dirige pretende ser un "chantaje a la Administración de Justicia y al Servicio Madrileño de Salud mediante el intento de colapsar la Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos más importante del país, con grave perjuicio para los pacientes". Además, sus abogados sostienen que las sentencias alegan que su reincorporación "es la mejor opción para el buen funcionamiento" del área.

Durante el segundo semestre de 2020 se tramitó, dentro del propio Hospital La Paz, un protocolo de conflicto interno entre el jefe de la Unidad y determinados facultativos de la UCIP, a instancias de estos últimos. Durante la tramitación de este procedimiento administrativo "no se permitió al jefe de la UCIP conocer el contenido de las denuncias, acceder al expediente administrativo ni formular alegaciones a la propuesta de resolución del instructor de forma previa a que la Dirección-Gerencia resolviese su cese", según apuntan sus abogados. El protocolo se tramitó siguiendo un modelo "inquisitorial", y no fue hasta la tramitación del proceso judicial cuando el denunciado pudo acceder al expediente administrativo, conocer de qué se le acusaba y ejercer de forma efectiva su derecho a defenderse.

Este proceso judicial culminó en primera instancia con la Sentencia 52/2023, de 6 de febrero, del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 24 de Madrid, que "no solo critica con dureza cómo se tramitó el protocolo, sino que declara expresamente que los hechos declarados probados en la resolución de protocolo, y que motivaron el cese como jefe de Servicio, son falsos".

Todos los denunciantes fueron emplazados debidamente por el Juzgado para personarse como codemandados en el proceso junto con el Sermas, contestar a la demanda y proponer todos los medios de prueba que estimasen oportuno. "Y dicho derecho no fue ejercido por ninguno de ellos porque así lo creyeron mejor para sus intereses", añaden fuentes del despacho de abogados.

En paralelo a lo anterior, el denunciado fue trasladado, "contra su voluntad y sin seguir procedimiento alguno", a una unidad ajena a la UCP y al propio Hospital La Paz; traslado que fue anulado, en primer lugar, por el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 8 de Madrid, en el marco de un procedimiento de protección de derechos fundamentales, y, de nuevo, en un procedimiento ordinario abreviado seguido ante el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 9 de Madrid.

"Mejor opción" para el funcionamiento de la Unidad

Asimismo, en junio de 2021 se inició un procedimiento disciplinario, contra el jefe de la UCIP, por la posible comisión de casi veinte conductas infractoras, que se prolongó durante casi un año y medio, y en cuyo seno se generó un expediente de 4.300 folios y numerosas horas de grabaciones. De las veinte conductas que fueron tenidas en cuenta en un primer momento como posibles actuaciones infractoras, el actor solo fue sancionado por la Administración por una única infracción, cuya suspensión ha sido suspendida cautelarmente por el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 10 de Madrid porque, entre otros motivos, la resolución sancionadora no explicita "el criterio empleado y su proporcionalidad, más allá de la mera cita de los preceptos legales".

Por todo ello, varias resoluciones judiciales han reconocido el derecho del jefe de Servicio a ser repuesto en su cargo y, además, "han estimado que su incorporación es la mejor opción para su buen funcionamiento". En la actualidad, "gracias a las medidas adoptadas por el jefe de la Unidad y la dirección del Hospital La Paz, la UCIP funciona con completa normalidad, más allá del déficit crónico en Enfermería que la Unidad lleva años arrastrando".