Íñigo Errejón, que se postula a presidir la Comunidad de Madrid, empieza a perfilar su programa sanitario. El candidato de Más Madrid aborda en esta entrevista con
Redacción Médica las
líneas clave de su visión de la sanidad: formación, condiciones laborales de los profesionales del Sermas, acceso a la tecnología sanitaria, relación con la industria farmacéutica… puntales que tras el 26 de mayo, día de las
elecciones autonómicas, podrían desembocar en la forma de gobernar la
sanidad de la región madrileña. Un sector que, entre sus propuestas, podría acabar con el área única o contar con una empresa pública para la reforma, reparación y construcción de las infraestructuras sanitarias.
Una vez aprobado un plan marco para reformar la Primaria a nivel nacional, ¿qué particularidades habría que modificar en la Comunidad de Madrid?
La
Atención Primaria recibe normalmente menos luz mediática porque luce menos que las inauguraciones. Todos los estudios demuestran que es la que tiene más capacidad de cuidar y prevenir enfermedades que luego van a tener tratamientos más largos o más costosos y en realidad es la base de un buen sistema sanitario. En la Comunidad de Madrid, el
Partido Popular ha puesto en marcha un
programa 'piloto', aunque luego lo ha frenado,
de recorte en el horario de tarde en Atención Primaria. Fundamentalmente esto va a repercutir en dificultar a muchos padres y madres en poder hacer uso de la Atención Primaria por si no llegan a tiempo.
Entrevista completa de Íñigo Errejón en Redacción Médica.
|
Hace pocos días estuve en el
Servicio de Urgencias del Hospital La Paz y nos decían que una buena parte del incremento de sus ingresos tienen que ver con la reducción y con las deficiencias de la Atención Primaria, que al final acaban haciendo que el cuello de botella sea Urgencias. Ahí nuestra posición es muy clara. En la medida en que es la columna vertebral y la primera puerta de entrada al sistema sanitario, hay que gastar más.
La Comunidad de Madrid es la
segunda de España que menos gasta en sanidad por habitante, pero además de gastar más, hay que dedicarle el 20 por ciento de los recursos de Sanidad a Atención Primaria. No solo con
infraestructuras sino en todo aquello relacionado con una agenda inteligente que permita que no se evalúe todo 'al peso', sino que se permita dedicar el tiempo adecuado a cada consulta, garantizando un mínimo de 10 minutos y apostando por los equipos complementarios, que ayuden a que no haya que derivar a los pacientes.
¿Cómo se pueden garantizar los derechos laborales del personal temporal y que no se le recorten derechos como el acceso a la carrera profesional?
Esta situación ha estado bloqueada durante 10 años y ahora se ha desbloqueado pero sin dotación económica, lo que equivale a no hacer nada. Ha habido un
abuso de la contratación no estable que redunda en perjuicio de la salud y de los proyectos de vida de los trabajadores, y también en la atención de los pacientes y de los usuarios de la sanidad pública madrileña. En ese sentido, creo que ahora mismo debe haber en torno al 40 por ciento de los contratados en condiciones inestables, y eso no tiene ninguna razón de ser.
"La sanidad debe tener ofertas de empleo público al menos cada dos años"
|
Hay que asegurarse de que salen las
Ofertas de Empleo Público, al menos cada dos años, tanto de plazas nuevas como recuperar las plazas que se han perdido en la sanidad pública madrileña, como que promocionen quienes están en condiciones de interinidad. En esta legislatura queremos avanzar hacia el objetivo de que haya solo un
10 por ciento de eventuales, porque hay una buena parte de la eventualidad que no se justifica por necesidades del trabajo que se desarrolla, sino porque no han salido plazas o porque se jubila gente que estaba trabajando en condiciones más estables y su misma plaza no sale en las condiciones en que se ha extinguido. Todo eso en un contexto en el que se han ido perdiendo
plazas de hospitalización en los hospitales.
Y hay que decirlo de forma muy clara: hay un divorcio entre la valoración que hacen los madrileños de su sanidad y la atención que reciben por parte del Gobierno regional. De fondo ha habido un
proceso de externalización, de reducir servicios concretos, asfixiando y derivando a la privada en casos que no era necesario, incluso pagando más por esas derivaciones para un proyecto que no es ni técnico ni económico y que se debe únicamente al fanatismo ideológico.
Primero hay que reducir la eventualidad hasta el 10 por ciento del total de los trabajadores de la sanidad pública madrileña. En cuatro años nos queremos encaminar hacia ese objetivo y después hay que facilitar que la
carrera profesional pueda desarrollarse. Y eso no es solo desbloquearlo formalmente sino que hay que dotarlo con dinero.
¿Qué propone para solucionar el exceso de guardias de los médicos?
Es obvio que las guardias tienen que existir, lo que no es obvio es que no se pueda prever y que sean a costa de la salud laboral, el estrés y de las ansiedades que se derivan, en el caso de los
MIR, que tengan que estar
con una guardia de 24 horas y que al día siguiente les llamen y tengan que acudir al hospital. Eso es insostenible. Pero es muy importante que eso no se quede en una discusión corporativa. No es insostenible solo para los trabajadores. Porque yo, como usuario de la sanidad pública, no quiero que si mañana tengo que acudir a Urgencias,
me trate alguien que lleva más de 24 horas trabajando. Y no es por egoísmo. Es que ese mismo profesional lo habría hecho mucho mejor si hubiera podido descansar.
Errejón analiza el papel del paciente.
|
Y eso tiene que ver, por una parte, con la
falta de contratación de personal, y por otra con la
falta de previsión a bajas o a necesidades puntuales del servicio que se sabe que van a ocurrir. Si lo saben, ¿por qué no nos podemos adelantar? ¿Por qué no podemos evitar que en el próximo pico de Urgencias se vuelvan a abrir telediarios? Pues porque para adelantarnos hace falta hacer dos cosas que el gobierno del Partido Popular no hace: gastarse más dinero en la sanidad pública y prever los problemas, en lugar de echarle la culpa a otros cuando suceden.
¿Plantea una reeducación del paciente también para que no acuda a las urgencias cuando no es necesario?
No niego que puede haber una parte de eso, pero de hecho precisamente en esta última visita el jefe de Urgencias me decía “si la gente viene es porque lo necesita, porque a nadie le apetece pasarse una tarde de sábado durante horas en el servicio de urgencias, no es un plan de ocio".
A lo mejor es que tenemos que
hacer un sobreesfuerzo, pero ese esfuerzo no se le puede estar cargando al paciente individualmente. Yo si cojo una gripe, por muy mal que me ponga, en general no acudo a Urgencias, pero mi tía que está mayor igual sí. No puede recaer sobre mi tía la responsabilidad de si conoce o no suficientemente bien el conjunto del sistema de sanidad pública madrileña para saber dónde tiene que acudir. Si no está percibiendo que hay otro sitio, tendremos que poner más de nuestra parte. Tendremos que asegurarle en el centro de atención más directa en su barrio, que lo tiene más accesible, que la van a poder atender, que le van a dedicar el tiempo que necesita…
No soy muy partidario de cargar la responsabilidad sobre los hombros de los pacientes que acuden, porque no creo que nadie lo haga por voluntad propia. Que la gente a veces lo retrasa, o espera un día… pues
ofrezcamos otras vías si no queremos que se colapse, porque nadie va por gusto. Yo tengo cierta hipocondría y si puedo no acudo a Urgencias.
Íñigo Errejón en el plató de Redacción Médica.
|
Los médicos internos residentes (MIR) se suelen quejar de que se sienten ‘mano de obra barata’ más que personal en formación. Si comparte esta afirmación, ¿qué propone para mejorarlo?
En Madrid durante los años en los que más se recortaba el presupuesto para la contratación de personal, se cubría a través de la formación, es decir, estábamos utilizando a los
profesionales que estaban haciendo el MIR para funciones que no siempre tenían que ser las suyas. Y ahí tendríamos que hacer varias cosas: Por una parte, hay que ponerse un poco más firmes y hay que
incrementar las funciones de supervisión. Creo que fue en el
12 de Octubre donde hubo una huelga por los trabajadores del MIR en Urgencias que decían “mire usted, así no podemos atender en las condiciones que deberíamos a los madrileños que vienen a tratarse”.
¿Qué papel debe tener el MIR en la sanidad?
|
Me interesa mucho señalar esto para que cuando el ciudadano nos lea, nos escuche o escuche a los profesionales de la sanidad, que no crea que está ante una reivindicación egoísta. Es muy importante
romper la barrera exclusivamente de las demandas corporativas para explicarle al conjunto que cuando los profesionales de la sanidad están reclamando algo, están reclamando algo que es nuestro, aquello que están demandando nos beneficia a todos. Yo también quiero tratarme por profesionales que lleven menos horas a sus espaldas, que se hayan podido formar mejor, que hayan podido desarrollar su trabajo en mejores condiciones.
Vuelvo a insistir: cuando en algún sitio estamos tapando agujeros, utilizando a gente que está haciendo el MIR, o gente que está haciendo más horas de las que debería, eso es porque hay un
agujero estructural que se tiene que tapar. Y ¿cómo se tapa? Con más contratación, tienen que salir más plazas para contratar a más personal.
¿Qué rol cree que le corresponde a la Enfermería dentro de la sanidad madrileña?
Diría que en Madrid estamos muy por debajo de la media de
contrataciones o de personal de enfermeras y de enfermeros, como un 35 por ciento o un 40 por ciento por debajo de la media nacional, cuando muchas veces los enfermeros y las enfermeras son quienes más impacto tienen en no solo tratamiento, sino también en recuperación y atención, en el bienestar.
"Hay que integrar más a Enfermería en las labores de dirección"
|
Todo el mundo, cuando ha pasado un tratamiento un poco más largo, sabe que al final la diferencia entre que salgas un poco más adelante, que tu paso por el hospital se te haga un poco más llevadero, que estés un poco más a gusto, que afrontes mejor la superación de la patología que te ha llevado a tratarte, tiene mucho que ver con la Enfermería. Ahí hay que asegurar de nuevo que la carrera profesional se pueda cumplir y pueda permitir mejores condiciones de trabajo y de desarrollo,
hay que asegurar que se integra más personal de enfermeros y enfermeras en las labores de dirección, porque son muchas veces quienes mejor y más directamente conocen las cosas que implican el día a día de un centro sanitario, de un hospital.
Tenemos que garantizar que las condiciones y su trabajo se puedan desarrollar con
menos precariedad y menos eventualidad. Creo que estamos hablando de un sector laboral que está en el corazón del sistema público y hay que garantizarle que trabaje en mejores condiciones, que pueda contribuir a ayudar al sistema público de salud. Ahí quizá necesitamos hacer un diagnóstico mejor, que nos permita saber con una planificación más inteligente en qué sectores podrían ayudar y contribuir más, además de las funciones que ya desarrollan.
¿Cree en la colaboración público-privada, de manera constante o puntual? ¿Se debe permitir que los médicos que trabajan en la sanidad pública a nivel de gestión puedan ejercer también en la privada o se les deben imponer límites?
Errejón analiza el papel de la Enfermería en la sanidad madrileña.
|
Respecto a la primera, soy un firme defensor de la sanidad pública, pero esto no es un a priori. Soy un firme defensor porque cuando se le deja, funciona bien, se trabaja bien. Es más barata y más eficaz. Así que defiendo el derecho de todo el mundo a
tratarse en la sanidad privada si así lo decide y así lo quiere pagar, pero yo quiero garantizar que la
sanidad pública de los madrileños puede desarrollar su trabajo bien porque es muy buena y quiero poder confiar en ella. Quiero que pueda hacer su trabajo sin privilegios para la privada y sin zancadillas o sin asfixias.
¿Es posible que en algunos casos
haga falta la colaboración? Sí, pero yo me querría hacer antes la pregunta anterior; ¿lo podemos desarrollar nosotros en la pública? No vaya a ser que en muchos casos acabemos pagando más en la pública por desarrollar cosas que las ha desarrollado la privada, a veces favoreciéndose de tratos privilegiados y por las que luego todos acabamos pagando más. Pero sí, se puede colaborar. Pero yo siempre me hago antes la pregunta: ¿no será acaso que lo podemos hacer mejor, más barato y más eficaz en la pública? Y en mi opinión y en opinión de la mayor parte de los profesionales, la respuesta casi siempre es que sí.
"¿Pueden colaborar la pública y privada? Sí, pero antes hay que saber si lo puede hacer la sanidad pública"
|
Con respecto a los
médicos que compatibilicen. Yo quiero ser presidente de la Comunidad de Madrid, no porque tenga las respuestas para todas las preguntas, sino porque tengo un método, que es que en las preguntas en las que no tenga la mejor respuesta, sé a quién preguntarle, a qué expertos.
No entiendo mucho este sistema de gobierno del Partido Popular que ha legislado sobre sanidad pública con la inmensa mayoría del sector sanitario en contra. Así que sobre esto, como siempre he tenido dudas, lo que he hecho ha sido preguntar, y cuando pregunto lo que me dicen es que siempre
hay un vivo y encendido debate entre la profesión (que yo creo que hay que dejar que se desarrolle y que llegue a una conclusión). Lo que tengo es una apuesta, que es que
si alguien decide dedicarse exclusivamente a la pública, eso hay que gratificarlo, hay que cuidarlo. Eso no significa que hay que penalizar lo otro, sino que si alguien decide que quiere hacer su trabajo exclusivamente en el centro público, yo quiero premiarle. Quiero bonificar ese tipo de comportamientos.
¿Está a favor de donaciones para tecnología sanitaria como la que realizó Amancio Ortega? Y, por otro lado, ¿qué modelo de acceso a esta tecnología defiende?
Con respecto a la donación creo que hay que estarle agradecido.
Cuando alguien que tiene mucho dinero decide gastar algo en una cosa que es buena para todos, está bien y hay que agradecerlo. Hay multimillonarios que tienen todo ese dinero y en lugar de gastarlo en máquinas para curar a los españoles se lo llevan a Andorra o a las Islas Caimán, así que prefiero que hagan eso.
Ahora bien, nosotros tenemos un
Estado. Humanamente está bien pero hace tiempo inventamos un sistema para que la generosidad de quienes más tuvieran fuera ayudando a quienes tuvieran menos, no solo por justicia sino porque era más eficaz. Una sociedad con menos pobreza gasta menos en sanidad y en dificultades sociales o tratamiento de clases pasivas y pensiones no contributivas. En los países prósperos se aseguran tres instituciones para que esto no sea la ley de la selva y una de esas instituciones, la más importante, es la sanidad.
Está muy bien que un millonario done pero
prefería que no dependiera de la generosidad porque Amancio Ortega puede ser muy generoso pero puede haber otros que no lo sean. ¿Y qué nos hemos inventado para que no dependa de que un día unos sean generosos y otros no lo sean?: Nos hemos inventado el
sistema fiscal. Para que con los esfuerzos de todos los madrileños (esfuerzo pequeñito de quién está peor y esfuerzo un poquito más grande de quien está mejor) podamos sostener una sanidad pública de vanguardia, de primera.
En Madrid tenemos bonificado el
impuesto de patrimonio; ojo, no el de la clase media sino de la gente que hereda más de un millón de euros. Lo tenemos tan bonificado que los 4.000 tipos más ricos en Madrid dejan de pagar mil millones de euros. Eso significa que podríamos hacer 25 veces la obra filantrópica de Amancio Ortega.
Con respecto a la
inversión en tecnología, máquinas e innovación que nos permita ser más punteros no es una decisión de gastar más o menos uno de en qué te lo gastas. Cuando a veces no invertimos terminamos pagando los tratamientos en un centro privado o en tener que mandar a la gente a otro lugar. Es como en la
ciencia elegir si te vas a gastar el dinero en laboratorios en Madrid o en pagar las patentes comprándoselas a los alemanes porque ahí si tiene laboratorios. La decisión no es gastar más o menos sino en gastar antes o después. Yo prefiero gastar en inversión que en pagar a otros lo que podríamos haber hecho nosotros.
Otra gran pata del Sistema es la industria farmacéutica. Quería saber qué opinión le merecía la relación con esa industria: ligar la inversión al PIB, el riesgo compartido y los genéricos. ¿Qué proponéis en el acceso a la innovación farmacéutica y sobre la creación de una industria pública del medicamento?
Es una problemática que excede un poco del ámbito autonómico. Necesitamos un
esfuerzo estatal. Nosotros podemos ir avanzado y debemos ir avanzando en todo lo que tenga que ver con la investigación y fabricación de medicamentos que se usen, se receten y administren en la sanidad pública pero creo que es un esfuerzo que nos sobrepasa un poco. Necesitamos hacer acuerdos con las autonomías o pedirle al Ministerio de Sanidad y al Estado que haga un esfuerzo decidido para que tengamos una
industria española de medicamentos.
Es posible que haya algunos en los que la relación entre lo que inviertes y el rendimiento que luego te da sea muy costosa o a largo tiempo pero hay otros en los que podría ser relativamente sencillo. Cuando hay situaciones de crisis o complicadas se demuestra que los poderes públicos tienen capacidad. No sé por qué no podemos explorar modelos en el que lo desarrollemos para el día a día haciendo una industria española del medicamento.
¿Es partidario de limitar la creación de nuevas facultades de Medicina ante la perspectiva de que el sistema no es capaz de formar a todos los médicos que se gradúan?
Estudié y me doctoré en una cosa muy diferente, en Ciencias Políticas y lo conozco poco. Me gustaría asegurar dos cosas. Por una parte, una supervisión estricta que garantice que se mantienen los mismos
estándares de calidad en la pública y la privada. Desconozco si es así en el campo de la Medicina pero en otros campos que conozco no siempre es igual de exigente la formación. Además, considero que hace falta algún tipo de
coordinación entre las necesidades del sistema público de salud y el número de plazas de profesionales de la Medicina que se producen.
Hoy tenemos un atasco que no tiene mucho sentido porque tenemos más gente formándose para ser profesionales de la Medicina de los que luego absorbe el sistema. Sin embargo, el sistema sí que está colapsado pero no porque los ciudadanos lo hayamos dejado de demandar. Digamos que el cuello de botella es artificial, hay que abrir la contratación, revertir los recortes, volver a incorporar a los miles de profesionales que se han perdido por culpa de estos.
¿Considera que se deben establecer sanciones para quienes practiquen pseudociencias?
Creo que hay que
regular los títulos y titulaciones porque hay proteger a los más vulnerables, que suele ser gente con situaciones muy complicadas.
No me he preguntado nunca por las posibles penas o sanciones que pueden tener. Es verdad que con los sectores no científicamente acreditados abrimos un abanico muy amplio, que abarca situaciones o tratamientos profesionales muy diferentes. Lo que me preocupa es la protección de los sectores más vulnerables y, por ello, hay que lanzar un mensaje de confianza a nuestros médicos: La Medicina no lo puede todo.
"Hay que proteger al paciente para que nadie se lucre con la desesperación"
|
Hay que transmitir
confianza en nuestros profesionales, confianza en nuestro sistema de salud y protección para que nadie se lucre con la desesperación de quien está particularmente preocupado, agobiado o de quien tiene miedo o de quien no ha podido obtener una respuesta satisfactoria de acuerdo con sus deseos porque la ciencia no nos da siempre la razón a lo que queremos.
Me comentaba que el otro día estuvo en La Paz, visitando el hospital. ¿Cree que era necesaria la reforma del hospital? ¿Les parece que está bien la propuesta que se ha hecho de inversión, no solo en La Paz, también en el resto de hospitales de la región?
Me preocupa un poco el mientras tanto. ¿Quién se va a oponer a la
construcción de nuevos hospitales? Son hospitales que tienen tiempo y dificultades. Es obvio que nadie va a decir: no me apetece nada. No tiene sentido. Ahora bien, en la Comunidad de Madrid hemos tenido experiencias con la construcción de nuevos hospitales; hospitales que construyeron empresas que pertenecían a la
trama Gürtel o la Púnica y hospitales que acaban después en manos de fondos buitres. Eso es enterrar muchísimo dinero público pagando más de lo que deberíamos haber pagado.
¿Qué hay que hacer en el mientras tanto? El Hospital La Paz lleva años prometiéndose, ha servido un poco como promesa cortina de humo. ¿Entre todos los años que lleva más las dos legislaturas que quedan, qué? Pues mientras tanto hay que invertir lo necesario para mantener las infraestructuras o para renovar las infraestructuras de los hospitales existentes, hay que hacer una
planificación general que no dependa de ocurrencias de ahora un hospital aquí y otro allí.
Necesitamos un mapa de cuántos edificios tenemos, cuántos centros públicos, algunos de ellos casi en desuso y cuáles son las necesidades. Eso el área única no permite hacerlo. Por ello, necesitamos poder volver a un
sistema de planificación por áreas que permita anticiparse a las necesidades de la población y prever las necesidades de los madrileños, pero no solo las de ahora, sino las de dentro de una década.
Íñigo Errejón explica cómo es su modelo de infraestructuras sanitarias.
|
Por cierto, tiene todo el sentido hacer un consorcio entre la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de Madrid para hacer una
empresa pública de obras con la que podamos reconstruir y remodelar esas necesidades. No puede ser que tengamos hospitales que tengan goteras o hospitales en los que la calefacción no va, o que de repente hay un ala que se tiene cerrar. Para eso tenemos que esperar a discutir, la burocracia… A lo mejor
necesitamos una empresa pública que se encargue de esas reparaciones que seguro que necesitan los hospitales.
Hace tiempo que entrevisté a José Manuel Calvo, concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Madrid, y me comentó que uno de los grandes proyectos que podía tener Manuela Carmena para la próxima legislatura era hacer un gran hospital en el sur de Madrid, en Carabanchel. ¿Mantienen esa promesa electoral?
Ojo porque también puede haber especulación o ladrillo con la construcción de hospitales. Es necesario tener un buen mapa y un
diagnóstico de cuáles son las necesidades y cómo podemos cubrirlas. Hay centros que no están cubriendo todas las necesidades que pueden cubrir y en muchos casos no es por falta de metros cuadrados. Tiene que ver con infraestructuras, con falta de personal…
Lo estamos estudiando tanto la candidatura municipal como la candidatura autonómica; y tenemos mucho interés en hacer ese mapa que asegure que por encima de las cosas que se inauguran y que son vistosas, somos capaces de garantizar el mantenimiento y renovación de lo existente.
Antes de empezar a derruir y levantar, ¿por qué no tenemos una conversación franca entre la sociedad madrileña y los profesionales sobre qué tenemos, qué funciona, qué no y qué es necesario? En muchos casos no es tan difícil, tiene que ver simplemente con escuchar al sector, a los profesionales.
¿Si tuvieran que pactar un Gobierno con PSOE cuáles serán las líneas rojas de Más Madrid para pactar el programa sanitario?
La Comunidad de Madrid es un desmadre. El otro día presentamos una denuncia ante la Fiscalía Anticorrupción porque la Cámara de Cuentas había dicho que
172 millones de contratos con dinero de todos los madrileños acabaron en empresas de la Gürtel o la Púnica, lo que significa que es una comunidad autónoma sin ley. Por eso, este dos de mayo vamos a celebrar la fiesta de la comunidad otra vez y no todos los expresidentes se van a poder presentar porque o acaban de salir de la cárcel o han sido imputados o porque están peleados con la mitad… es una situación anómala. Nos hemos acostumbrado, pero me da vergüenza cuando viajo por España porque me hablan de esto y quiero que me hablen de la sanidad, la educación, la investigación…
¿Cuáles son las convicciones? Pues que hay que poner fin a este desmadre. En la sanidad tiene que ver con lo que hemos visto: que las
externalizaciones son más caras. No solo empeoran el servicio o las condiciones de los profesionales, es que son más caras. Pusimos una denuncia en Fiscalía diciendo que la Consejería de Sanidad sabía que cuando derivaba pacientes de un hospital público a uno privado sabía que a veces estaba pagando hasta 6 veces por un tratamiento que valdría 6 veces menos en la pública. Eso se tiene que acabar.
"Debemos recuperar una sanidad pública que está troceada y asfixiada"
|
Hay que
revertir las privatizaciones y hay que recuperar una sanidad pública que no esté troceada, malvendida, asfixiada. Con todo el que quiera hacer esto nos vamos a entender. Con quien no quiera hacerlo, en realidad lo que quiere es perpetuar un modelo del Partido Popular que ha creado una comunidad a dos velocidades, un pequeño cogollo que son amigos y que se llevan contratos y una mayoría de madrileños que ve como una buena parte de sus derechos se han ido limitando. Por ejemplo, unas largas
listas de espera, tratamientos con mayores dificultades…
Con quien esté de acuerdo en recuperar la sanidad pública madrileña, de calidad, gratuita, universal, orgullosa y puntera nos vamos a entender.
Puede que nuestros lectores estén un poco confusos entre ustedes y Podemos. ¿Qué le ofrece usted a ese votante para que se decante por Más Madrid?
Nosotros nos presentamos haciendo bandera de dos cosas. Una, sin anteojeras ni mochilas, de tal manera que podemos escuchar a los profesionales vengan de donde vengan y hayan votado lo que hayan votado porque cuando yo voy a un hospital no les pido que me voten,
les pido que me cuenten, eso solo se hace si tienes más ganas de escuchar que prejuicios.
La segunda, sabemos
gobernar. Nos hemos hecho cargo del Ayuntamiento de Madrid, hemos reducido la deuda en un 30 por ciento y hemos puesto orden en la ciudad. Igual que lo hemos hecho en la capital de España lo vamos a hacer en la comunidad autónoma.
Pablo Iglesias dijo en una entrevista con Redacción Médica que “en la sanidad había más trama que casta”. ¿Aún le vale ese titular?
El problema en la sanidad pública no es con los profesionales. El problema en la sanidad pública tiene que ver con que no se les deje trabajar, con que
falta inversión y luego con que muchas veces por encima tienen
directivos colocados a dedo por ser del partido que gobierna, eso hay que revertirlo.
Tenemos que ir hacia un modelo que reduzca las estructuras de dirección, no hace falta tanto. No sé, yo tenía buena relación con Rafael Catalá, pero pasó durante un tiempo por director de un hospital creo sin haber acreditado conocimiento del mismo. Hay que reducir los cargos que se designan a dedo para dirigir hospitales públicos. Hay que ir caminando de una cultura de la obediencia a una que tenga que ver con la competencia personal. A que quien se ponga al frente de gestionarlo no se ponga porque es afín al partido que gobierna sino porque lo sabe hacer. En este sentido, me comprometo a que cuando tenga que nombrar a alguien que se ponga al frente de un hospital voy a preguntar quién lo hace bien y porque lo sabe hacer.
Creo en la sanidad pública, quiero que sea la mejor y quiero que la de Madrid sea la mejor de España y eso no se hace poniendo al frente de un hospital a alguien que es de Más Madrid, se hace poniendo a un buen profesional.
El candidato Íñigo Errejón ha analizado los principales retos de la sanidad madrileña.
|
Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.