Un especialista en enfermedades infecciosas del Hospital Universitario La Paz (Madrid) afronta una de las sanciones más graves que se recuerdan en la sanidad madrileña: dos años de suspensión de empleo y sueldo. La falta cometida está a la altura de la gravedad de la sanción, ya que el facultativo presuntamente falseó los diagnósticos y la historia clínica de sus pacientes para exagerar su gravedad.
La Comunidad de Madrid abrió expediente a Vicente Soriano en junio de 2015, después de que se detectara falta de datos y errores en los historiales de 15 pacientes a los que este facultativo había prescrito los fármacos para la hepatitis C. Además, entre otras irregularidades, se comprobó que el médico había atendido a un paciente que reside en México en su consulta y había usado el historial de enfermo para poder suministrarle el tratamiento.
Desde la Coordinadora Estatal de Afectados por Hepatitis C se ha intentado defender el caso del médico, arguyendo que su actuación se basaba en que los enfermos tuvieran garantizado el acceso al tratamiento. No obstante, la Comunidad de Madrid suministra a todos sus pacientes de hepatitis C los medicamentos de última generación, según indicación del especialista. La práctica totalidad de los pacientes con los grados F2, F3 y F4 de la enfermedad están siendo ya tratados.
No es la primera ver que se sanciona a este facultativo. Ya en 2011 tuvo que pagar más de 210.000 euros tras detectarse graves irregularidades en los ensayos clínicos de un tratamiento para el VIH. El médico no recababa la autorización de los pacientes a los que suministraba un fármaco innovador. Además, este mismo facultativo tiene otro expediente abierto desde 2013.
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