El Hospital Isabel Zendal será el protagonista y sede del '
', en el que los mayores expertos en gestión y tratamiento del coronavirus pondrá en común las experiencias adquiridas. El coordinador general del centro,
cuál será el contenido del evento, cómo han sido los primeros seis meses de apertura del Zendal o los próximos retos que se deben asumir.
Los próximos días 23 y 24 de junio el Hospital Isabel Zendal va a acoger un encuentro internacional sobre Covid-19, en el que expertos nacional e internacionales de primer nivel debatirán y pondrán en común las experiencias adquiridas durante la pandemia. ¿Cuáles serán los principales asuntos que se aborden en esta jornada?
Entrevista a Fernando Prados, coordinador general del Hospital Isabel Zendal.
|
Después de más de seis meses recibiendo pacientes y de haber tratado a más de 6.000 personas, consideramos que es el momento para contar qué es lo que hemos estado haciendo en el Zendal y qué tratamientos, qué manejo y qué situaciones han sido la que hemos vivido durante la pandemia. Es cierto que el recorrido del centro ha sido muy corto, apenas medio año, mientras que la pandemia lleva más de un año con nosotros. Aun así, hemos podido recoger cantidad de experiencias y conocimientos y compararlos con las de otros sitios donde han tenido que manejar la misma situación que nosotros.
Uno de los aspectos que se van a tratar en este encuentro es el reto de los antivirales. ¿Considera que, junto con las vacunas, son la última estocada al Covid-19?
Las vacunas, claramente lo son. Las consecuencias de la vacunación de las personas que ya han recibido sus vacunas son extraordinarias para el sistema, porque estamos recibiendo menos pacientes. Respecto a los fármacos tenemos un problema, pues llevamos muy poco tiempo tratando con ellos. Hemos visto una evolución de los pacientes en un corto espacio de tiempo y, hay que destacar que los tratamientos que en un principio se vieron como inútiles, resultaron absolutamente necesarios.
En el caso de los antivirales se están analizando sus resultados y comparando series más amplias de pacientes. Aun así, todavía tenemos que compararlos con otras series y seguir trabajando porque, estoy seguro, que el tiempo, al final, y como pasa siempre en la Medicina, nos enseñará muchísimo más que el estudio diario. Ver la evolución de estos pacientes y sus tratamientos nos va a decir definitivamente cuál es el tratamiento que debemos de aplicar a estos pacientes.
Una de las principales características del Zendal es que cuenta con una Unidad de Rehabilitación Integral PostCovid. ¿Cuáles son las principales secuelas que detectáis en los pacientes que más han sufrido el coronavirus?
Contar con un hospital monográfico y un número elevado de pacientes, así como destinar todos los recursos que tiene el sistema para a aquellos que salían de la Unidad de Cuidados Intensivos y que habían estado mucho tiempo intubados, salían con unas secuelas pulmonares que requerían una rehabilitación antes de darles el alta. En vez de derivarles a recibir ese tratamiento en otro sitio, decidimos crear esta unidad para dar soporte a ese tipo de secuelas.
Estos pacientes están sufriendo muchas secuelas, desde psicológicas hasta físicas, neurológicas y músculo esqueléticas, pues cada una de ellas requiere un tratamiento individual. Lo tuvimos que hacer porque para dar el alta a estos pacientes tenían que avanzar en una serie de alteraciones que no venían con el paciente cuando ingresaba, pero sí que nos dábamos cuenta que en el transcurso del tratamiento aparecían y teníamos que darle respuesta.
Prados: "Hemos tenido que demostrar los resultados del Zendal para que se viera que es absolutamente necesario".
|
¿Pueden las secuelas causar más estragos a medio y largo plazo que el propio transcurso de la enfermedad?
Sí, y en este aspecto también tenemos el problema del tiempo. No sabemos exactamente qué va a pasar dentro de tres años cuando se supere el Covid tal y como la concebimos hoy y lógicamente aparezcan todas aquellas situaciones que no habrán sido bien planteadas. El reto del sistema de salud ahora mismo es planificar la atención sanitaria postCovid y hasta que no pase la pandemia eso va a ser complicado. Pero una vez que pase la pandemia, veremos qué qué secuelas ha dejado tanto individual como socialmente el paso de la pandemia y qué consecuencias ha implicado también en el sistema asistencial de los diferentes sistemas de salud, que tendrán que para volver a la normalidad y hacer un esfuerzo suplementario.
El Zendal acoge el citado encuentro internacional sobre el Covid. ¿Se ha convertido el hospital en un referente internacional en la gestión de pandemias y de hospitales monográficos?
A pesar de los augurios de muchos, el Hospital Isabel Zendal ha cumplido con el objetivo que se había planteado al principio: atender a pacientes Covid para liberar a los hospitales de un exceso de pacientes que limitaba su actividad asistencial normal. Esto ha sido posible con un hospital monográfico. Hacerlo durante una pandemia a cualquiera que se lo dijeran le parecería absolutamente normal. En este caso, tuvimos que explicar muchas veces qué es el Zendal. Y hemos tenido que demostrar los resultados para que se viera que es absolutamente necesario.
Es verdad que según ha ido pasando el tiempo, se ha demostrado que ha aportado soluciones que difícilmente se podían haber conseguido sin que este hospital se hubiera puesto en marcha. Es un referente en el mundo porque se ha hecho de una manera espectacular la construcción y, además, el número de pacientes que tiene la Comunidad de Madrid le ha dado una dimensión que es muy difícil encontrar en ningún otro sistema sanitario.
Esto es lo que de verdad nos hace referencia, porque los profesionales son los mismos que los del Sistema Madrileño de Salud, que son los mejores. Y los medios son los medios del Sistema Madrileño de Salud, que son los mejores, se han destinado a este hospital, que no está al margen del resto.
Al Zendal lo tenemos que considerar como una herramienta del sistema. No es un hospital individual que trata cuestiones absolutamente aisladas, sino que es una herramienta más del sistema que no solo ha tratado mejor a los pacientes Covid, porque ha podido concentrarlos, ha podido concentrar el conocimiento de una enfermedad que lógicamente no se conocía porque llevamos muy poquito tiempo en ella. Pero además de concentrar conocimiento, ha permitido recoger muchísimos datos y dar la posibilidad de conocer cómo afecta la enfermedad y cuáles son los mejores tratamientos. Esto en otros sitios no se ha podido hacer porque no han tenido la posibilidad que ha supuesto este hospital, tanto a nivel social como a nivel médico.
"Al Zendal lo tenemos que considerar como uan herramienta del sistema, no como un hospital individual que trata cuestiones aisladas"
|
Recientemente se han cumplido seis meses desde que el Zendal acogiera a su primer paciente, ¿qué es lo que esperas del hospital para los próximos seis meses de aquí en adelante?
Mientras tengamos la pandemia pensar en cualquier otra actividad a mí me pone hasta nervioso, aunque sí que es verdad que hay que planificar y hay muchas cuestiones que ya están sobre la mesa. Una de ellas es la adecuación de un pabellón para servir de apoyo a La Paz durante las obras de este hospital.
También hemos visto que el Zendal es una herramienta indispensable para campañas de vacunación, con unos resultados, y lo queremos potenciar. Ahora mismo el pabellón que está destinado a las obras de La Paz está siendo usado para la vacunación y posiblemente habilitemos un nuevo pabellón en cuanto los pacientes nos lo permitan, cuando el número de pacientes baje, para intentar potenciar la vacunación e intentar terminar con esta pandemia lo antes posible.
En el caso de que viniera otra ola, en el caso de que apareciera otra pandemia, en el caso de que hubiera otro tipo de infecciones, este hospital se ha concebido para poder tratar ese tipo de pacientes de una forma especial y tenemos una disponibilidad inmediata para cambiarlo, para habilitarlo, para hacerlo específico en el tratamiento de la patología que queramos.
Respecto a los MIR que tienen la posibilidad de rotar en el hospital, ¿por qué les aconsejarías venir al Zendal y no a cualquier otro centro?
Quien estudia Medicina lo hace con una mínima vocación. Todos los que hemos estudiado Medicina sabemos para qué lo hemos estudiado y por qué lo hemos estudiado. Si encima tenemos la posibilidad de ser contemporáneos de una pandemia y de haber convivido con ella, tratándola y consultando pacientes, que es algo que va pasar a la historia, tienen la oportunidad de ser protagonistas.
Una de las cosas que más me llamó la atención cuando empezó la pandemia, se decidió no contar a los estudiantes de Medicina en los hospitales por si se infectaban. Claro, yo me decía a mí mismo, que si esta gente está estudiando y hace la carrera durante una pandemia donde va a cambiar muchas cosas de la Medicina y la sociedad, resulta que lo que hacemos es retirarlos para que no lo vean. Me parece raro.
"Todos los que hemos estudiado Medicina sabemos para qué lo hemos estudiado y por qué lo hemos estudiado"
|
En el Zendal tienen unas posibilidades que no van a encontrar en ningún sitio y en ningún otro tiempo. Algunas personas que han pasado por aquí habían sido traslados forzosos y ahora reconocen que no les hubiera gustado perderse esto porque es una experiencia que no van a poder volver a ver. Es una Medicina que te enseña muchas cosas porque te hace cambiar tu metodología habitual de trabajo hospitalario, que está muy encorsetada y muy fijada. Aquí no funcionábamos así, porque aquí todo es diferente. Quienes han pasado por aquí van a poner muy alto en su currículum muy alto que han estado en el Hospital Isabel Zendal.
¿El Zendal ha demostrado que el sistema público, que siempre se ha caracterizado por ser rígido y lento a la hora de tomar decisiones y adaptarse, ha demostrado que se pueden hacer las cosas con velocidad y adaptándose a las circunstancias lo más velozmente posible?
Esta Consejería de Sanidad, desde el primer momento, decidió que las cosas no podían estar cómo estaban. No podían dar soluciones ordinarias y habituales porque estábamos en una pandemia, estábamos en una situación extraordinaria y había que hacer cosas extraordinarias. Desde el principio esta Consejería se dio cuenta de que no se podían solucionar las cosas dejando pasar el tiempo, sino que había que implicarse Y había que hacerlas.
Esta es la demostración más clara de capacidad de adaptación, pero también se ha demostrado abriendo hoteles sanitario o cuando se puso en marcha el Hospital Ifema. También se terminó en Atención Primaria para dar respuesta telefónica y los hospitales se dimensionaron de una forma increíble y se hicieron hasta obras para el suministro de oxígeno. Y el último paso fue construir nada más y nada menos que un hospital para dar respuesta a lo que estábamos viviendo, que es el Hospital Isabel Zendal.
Jesús Mediavilla, periodista de Redacción Médica, y Fernando Prados.
|