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Hospital La Paz asume uno de los retos más importantes de su historia desde que se fundase en 1964. A partir del próximo 2022, comenzarán las obras para el nuevo hospital que supondrá una "revolución", según su propio gerente,
Rafael Pérez-Santamarina, que en una entrevista con
Redacción Médica analiza cuáles son los principales avances, las experiencias del actual centro durante la pandemia y el papel de la vanguardia e innovación en nuevas tecnologías.
¿Qué avances supone para La Paz las obras del nuevo hospital?
El nuevo La Paz es una estructura totalmente nueva y moderna, que está pensada para el paciente y los trabajadores. Es una revolución. Va a ver una mejora total. Es un hospital pensado en el futuro.
En un momento de pandemia como el actual, el histórico crecimiento desordenado de La Paz ha provocado que las circulaciones sean muy complicadas y que los servicios no estén coordinados como debieran, dado que no se encuentran ubicados en la planta o área en la que teóricamente deberían encontrarse.
Además, contará con infraestructura para incorporar nuevas tecnologías, muchas de las cuales hasta ahora no se han podido aplicar por falta de espacio, como la radioterapia, para la cual no se puede hacer un búnker nuevo en el actual centro. Lo hemos visto con la pandemia del Covid-19, que ha supuesto una revolución en la planificación del hospital de cara al futuro. Tenemos que estar preparados para cuadros similares en el futuro y poder adaptarnos.
¿La pandemia del Covid-19 nos ha permitido darnos cuenta de lo realmente importante que es la innovación y comenzar a situarla en el centro de las prioridades?
Desgraciadamente, así ha sido. Los sistemas de comunicación y telemedicina han recibido un impulso brutal en relación al desarrollo más lento que se estaba realizando hasta antes de la pandemia. Hemos subido varios peldaños de golpe. Estos elementos han llegado para quedarse. Se ha aprendido mucho y la telemedicina se aplicará toda la experiencia que hemos tenido.
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Pérez-Santamarina: "La sanidad pública y la privada son dos patas que tienen que estar bien correlacionadas"
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¿Cuáles son los retos PosCovid que debe asumir La Paz?
La recuperación de la actividad normal. Ha habido muchos procesos, quirúrgicos y no quirúrgicos, que han sufrido por diversos motivos demoras importantes. Tenemos que hacer una actividad normal, habitual y mejorada con los procesos telemáticos que han estimulado y hecho que el profesional cuente con un campo más amplio de actuación. Unas mejoras que se usarán en la asistencia y servirán de estímulo para tener menos listas de espera, tanto de consultas y pruebas diagnósticas, como en intervenciones quirúrgicas.
Es verdad que no estamos mal en relación con las intervenciones quirúrgicas y la demora, pero hay un núcleo de intervenciones que, por diversos motivos, y por el miedo de los propios pacientes, están pendientes y aún no han aflorado, pero lo harán. Procesos patológicos, incluso, que están más avanzados de lo que deberían y que debemos resolver de una manera inmediata.
No olvidemos que aún tenemos presente el Covid. Ahora hay unos 60 pacientes ingresados, de los cuales 19 están en la UCI. Es una cifra pequeña para lo que hemos tenido, pero sigue siendo importante, porque son dos plantas de hospitalización dedicadas solamente a Covid, cuando antes para procesos de Medicina Interna.
La Unidad de Terapias Avanzadas de La Paz ha recibido un premio a la Mejor Unidad de Referencia en Terapias CART. ¿Qué supone este logro para el hospital en un ámbito tan vanguardista?
Supone mucho. Nosotros siempre estamos a la vanguardia en temas como las terapias avanzadas CART y en casi todo tipo de investigación. Por eso tenemos un instituto de investigación con su fundación correspondiente, que es pionero y que tiene más de 2.000 ensayos clínicos activos. La actividad investigadora del hospital es enorme y queremos y seguiremos potenciándola. A parte de las CART, en lo que vamos muy por delante, sobre todo en Oncohematología, también estamos desarrollando ensayos clínicos con las vacunas de Janssen, Astrazeneca y Pfizer. Es una prioridad del hospital estar en la vanguardia en todo lo que se trata de mejoras asistenciales y de tecnología. Un ejemplo de ello es que próximamente estrenaremos un equipo de Oncología Radioterapia que es único en España.
¿Cómo entiende que debe ser la colaboración público-privada en el ámbito hospitalario?
La colaboración público-privada es muy importante. Se ha demostrado con el Covid, en donde la sanidad trabajó como si fueran una sola. Hay una buena colaboración entre ambas, la cual ha sido fundamental en muchos procesos. La sanidad privada, en muchos casos, tiene más posibilidades de asumir determinadas tecnologías y que después se aplicarán en la pública. Así que es un beneficio para todos. Son dos patas que tienen que estar bien correlacionadas, porque, por ejemplo, cuando hay un exceso de demoras en algún campo, a través de la privada se puede establecer alguna mejora.
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Jesús Mediavilla, redactor e la sección de Autonomías, entrevista a Rafael Pérez-Santamarina.
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