Ante el escrito presentado por algunos médicos tutores de
Medicina de Familia y Comunitaria de Atención Primaria en el que manifiestan su renuncia a la tutorización de los nuevos residentes ( R1) procedentes de la convocatoria nacional actualmente en curso, la EOXI de Vigo les informó que la citada renuncia no procede dado que en este momento a oferta de plazas de formación sanitaria especializada ya se ha llevado a cabo por orden SCB/947/2018, de 7 de septiembre de 2018. En consecuencia, podría generar un perjuicio para aquellos residentes que a partir del próximo 24 de abril -fecha de inicio de asignación de plazas- hayan optado por la Unidad que acaban de presentar su renuncia .
Además, en esa convocatoria, el área de Vigo consiguió la cifra récord de
24 plazas para la formación de especialistas de Medicina Familiar y Comunitaria, el número más alto de Galicia. Esto ha sido posible
gracias al esfuerzo colectivo de todos los profesionales del área; y este tipo de medidas podría llevar a perder la acreditación.
Imperativo moral
A normativa reguladora del sistema público de salud, desde la Ley General de Sanidad hasta la
Ley de cohesión y calidad del Sistema Nacional de Salud, establece la necesidad de que toda la estructura del sistema sanitario esté la disposición de las enseñanzas de grado, especializada y continuada de los profesionales, con un deber inherente a colaborar en la formación de los profesionales que presten servicios en las distintas unidades asistenciales en que se formen residentes.
Pero al margen de las disposiciones normativas, existe un im
perativo moral con la docencia y formación. La enseñanza es algo propio e inherente de la condición y de la profesión médica.
No asumir la docencia de los residentes una vez estos tengan elegidas sus plazas supone, además de un
fraude a los profesionales en formación, por en riesgo a acreditación docente del área sanitaria y desestabilizar el intenso trabajo docente que ha permitido garantizar la disponibilidad de profesionales para mantener la cobertura asistencial de la población.
En consecuencia, debe imperar la
coherencia y el
sentido común. A día de hoy, todas las sociedades médicas y científicas así como las diferentes organizaciones de ámbito sanitario coinciden en que el mayor reto que debe afrontar la
Atención Primaria es el tema de la cronicidad, objetivo que se ve dificultado por la
carencia de especialistas.
Medidas de presión
Así, siendo lícito el planteamiento de determinadas medidas de presión frente a administración sanitaria, no se entiende esta
propuesta de dejar de formar a las próximas generaciones de especialistas ya que no sería ninguna solución para la Atención Primaria; por el contrario,
contribuiría a dificultar el incremento de médicos de Familia. Se trata de una medida que
perjudica muy seriamente la este nivel asistencial, al servicio público de
salud y a sus
usuarios.
Por último, desde la dirección de la EOXI de Vigo ha hecho un llamamiento a la responsabilidad y al compromiso moral con la formación y con el relieve generacional, tal y como se ven demandando.
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