Alfonso Rueda Valenzuela, Pontevedra, 1968. Es el hombre en el que todo el Partido Popular ha puesto sus esperanzas para que el PP mantenga la
Xunta de Galicia y presionar, así, a un Gobierno central encabezado por el socialista Pedro Sánchez. Rueda es el político al que todo Génova 13 ha estado observando durante estas últimas semanas. Y es que, desde la planta noble de la sede de los populares, el presidente nacional de la formación,
Alberto Núñez Feijóo, buscaba un respiro con una nueva mayoría absoluta en el
Parlamento de Galicia, ya que una derrota en su comunidad autónoma podría levantar ampollas en el PP, pues perder uno de sus gobiernos más preciados podría desencadenar en nuevas
pugnas internas. Y las urnas han hablado,
nueva mayoría del Partido Popular en Galicia, que gobernará Galicia por cuarta legislatura consecutiva, con un Rueda de presidente que pretenderá convertir al
Servizo Galego de Saúde (Sergas) en un sistema sanitario "más proactivo y que se adelante a la enfermedad".
Rueda, sucesor de Feijóo en el trono gallego, así como en el PPdeG, se ha enfrentado a
sus primeras elecciones al Parlamento de Galicia como número uno y
candidato de su partido a la Presidencia del Ejecutivo autonómico.
Licenciado en Derecho, inició su andadura política de la mano de las Nuevas Generaciones del PP de Galicia,
Novas Xeracións. Empezó a coger
experiencia institucional en ayuntamientos como el de Cervantez o A Cañiza y Cambados, para después ‘pegar’ el salto a la Consejería de Justicia, Interior y Relaciones Laborales, pero como
jefe de Gabinete del entonces consejero, Xesús Palmou.
En el año 2006 fue elegido
secretario general del Partido Popular de Galicia, asumiendo responsabilidades también orgánicas. Tres años más tarde, en 2009, concurrió a los comicios gallegos como cabeza de lista por la provincia de Pontevedra, y en marzo de ese mismo año fue
nombrado consejero de Presidencia, Administraciones Públicas y Justicia, con Feijóo como presidente. En 2012 dio un nuevo paso en su carrera política, convirtiéndose en
vicepresidente de la Xunta, además de ostentar el cargo de consejero del mismo departamento.
Tras más de una década al lado de Feijóo,
el 14 de mayo del 2022 llegó, por el momento, a su culmen político, haciéndose con el puesto de presidente, después de que su hasta entonces jefe fuera reclamado para liderar al Partido Popular a nivel nacional tras la convulsa etapa de Pablo Casado al frente del PP. Ahora, con su primera victoria electoral en Galicia como candidato popular a la Xunta, el líder del PPdeG priorizará en su política sanitaria afianzar al
Sergas como un sistema "referente" en todo el Estado en ámbitos como el
"calendario vacunal, cribados y adaptación digital".
El ’trono’ de la Xunta
El escrutinio de los votos ha esclarecido el
nuevo panorama político en Galicia. Y Rueda, que esperaba mantener el conservadurismo de los
populares al frente de la Xunta de Galicia, ha logrado su objetivo, dejando a Ana Pontón y su Bloque Nacionalista Galego (BNG) con la miel en los labios. Con el apoyo explícito de los electores, el líder del PPdeG se reivindica como barón ‘todopoderoso’ en Génova 13, como sus homólogos
Juan Manuel Moreno Bonilla en Andalucía e Isabel Díaz Ayuso en la Comunidad de Madrid. Cuatro años tendrá por delante un Rueda que tratará de afianzar Galicia como bastión del PP con su
nuevo liderazgo.
En todo caso, lo que parece cierto es que las
elecciones de este 18 de febrero han abierto un
nuevo ciclo electoral en España. Y es que en pocos meses vendrán los comicios vascos, que previsiblemente se celebrarán en primavera. Después vendrán las europeas, el 9 de junio, y unos meses más tarde podrían celebrarse las catalanas primero y las andaluzas después.
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