La humanización del médico sumará puntos propios en la carrera profesional

El Servizo Galego de Saúde (Sergas) incentivará la humanización en el ejercicio de la profesión del personal sanitario en la valoración de la carrera profesional, ya que reivindica que la atención sanitaria "ha de estar centrada en la dignidad y respeto" tanto de pacientes, familiares como profesionales.

Así consta en la orden de 1 de marzo de 2022 publicada este miércoles en el Diario Oficial de Galicia (DOG) por la que se aprueba el baremo en la parte correspondiente al área I --relativa a la actividad asistencial/profesional--, aplicable en el procedimiento ordinario de carrera profesional del personal del Sergas y entidades adscritas a la Consellería de Sanidade y a dicho organismo.

En esta orden el Sergas recuerda que en la mesa sectorial del 1 de febrero de 2022 se aprobó, por mayoría, el baremo ordinario de carrera profesional correspondiente al área I relativa a la actividad asistencial/profesional, que valora, según puntualiza, "el rendimiento eficiente y eficaz, la calidad y la praxis correcta, así como la mejora y actualización de procesos y métodos de trabajo". De este modo, a través de esta orden se desarrollan las bases para valorar, por una parte, "la participación de los profesionales sanitarios en la consecución de los objetivos corporativos o de la actividad de su servicio/unidad" y, por otra, las "competencias personales necesarias para contribuir a la mejora de la calidad de los cuidados asistenciales a pacientes, usuarios y ciudadanos".

En concreto, se incorpora la humanización "como objetivo en el ejercicio de la profesión, entendiéndola como el abordaje integral de la persona, atendiendo sus necesidades tanto físicas como emocionales y psicológicas", se explica en esta orden. La finalidad de estas bases, explica el Sergas, "es desarrollar acciones específicas que contemplen una dimensión transversal de la calidad asistencial, ofreciendo un cuidado de la salud excelente, no solo desde el punto de vista técnico, sino también más humano y contemplando al profesional como motor de cambio social".

La humanización de la sanidad "implica considerar que la atención sanitaria ha de estar centrada en la dignidad y respecto de todos sus actores: pacientes, familiares y profesionales", abunda, para añadir que "se trata de caminar hacia una actividad orientada al cuidado de la salud, tanto física como mental y emocional, dirigida a los pacientes y a los propios profesionales sanitarios". En este sentido, considera la Administración sanitaria que "se hace imprescindible" formar a los profesionales para "mejorar la interacción con los pacientes, familiares y compañeros de trabajo", capacitándolos, añade, "para desarrollar competencias emocionales, de comunicación y de resiliencia, "con el fin de alcanzar una atención de calidad que asegure el abordaje integral del paciente a todos los niveles".

También considera el Sergas "necesario" que "todos los agentes de la salud incorporen conocimientos habilidades específicas relacionadas con el entorno digital y la transformación que implica".

El objeto de evaluación del área I, según se indica en la orden, se centra en "valorar la actividad que realiza el profesional y las competencias personales que demuestra tener en el desarrollo de esa actividad", es decir, "se evaluará el rendimiento del profesional (lo que hace) y el desempeño (cómo lo hace)". Todo ello, en cuatro grandes áreas: habilidades de relación, capacidad de adaptación e implicación en la integración de la igualdad desde la perspectiva de género y de la diversidad; trabajo en equipo y capacidad de resolución de conflictos; organización y utilización eficiente de recursos; y competencias digitales.

La orden firmada por el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, aprueba los méritos correspondientes al área I de actividad asistencial/actividad profesional/ desempeño profesional, que se evaluarán en el procedimiento ordinario de carrera profesional "para el acceso a los sucesivos grados de los diversos colectivos profesionales, profesiones o categorías". Además, se puntualiza que se habilita a la Dirección Xeral de Recursos Humanos del Sergas "para completar y, en su caso, modificar los criterios de evaluación y el procedimientos y forma de acreditación, previo tratamiento en la Comisión de Seguimiento del acuerdo de carrera profesional".

Por tanto, en este apartado se valorará la actividad y desempeño individual, el rendimiento eficiente y eficaz, la calidad y la praxis correcta, así como la mejora y actualización de los procesos y métodos de trabajo. Para ello, se desarrolla un sistema de evaluación en el que se evalúa la participación de los profesionales sanitarios en la consecución de los objetivos/actividad de su servicio/unidad y también las competencias personales que los capacitan para poder incrementar la calidad de los cuidados asistenciales y la competitividad del conjunto del sistema de salud.

En especial, se indica que "se incentiva la incorporación de los principios de humanización" en las políticas de la organización sanitaria e institucional y "se busca potenciar un estilo de relación entre las personas donde se ponga el acento en las competencias personales del propio profesional y no tan sólo en los resultados de las acciones que desarrolla". También se concreta que para medir el desempeño de estas competencias personales se empleará como herramienta "la evaluación 180 grados". En este sistema de evaluación participa el profesional "valorando sus competencias personales a través de la autoevaluación y también intervienen los profesionales que tienen relación directa con él/ella: el/la superior jerárquico/a o responsable directo y los/las pares o iguales".

El acuerdo de carrera profesional establece que para el reconocimiento del grado correspondiente será necesario obtener, por lo menos, un 30 por ciento del número máximo de puntos previstos en esta área I. La valoración será anual y, se matiza en la orden, "la llevará a cabo el/la jefe/a de servicio o responsable jerárquico que se determine". Además, se puntualiza que esta valoración "deberá ser conocida por los profesionales".

El Servizo Galego de Saúde incide en que la evaluación de las competencias personales "permite identificar las fortalezas de los profesionales y sus puntos de mejora y sugerir planes de mejora". Al respecto, apunta que suponen "un sistema que requiere del compromiso de todos los integrantes de la organización", que se materializa "en la cumplimentación de los cuestionarios de evaluación".

De este modo, una ver procesados los datos resultantes de la evaluación, se emitirá un informe individual. El superior jerárquico o responsable directo se entrevistará con el profesional evaluado y propondrá un plan de mejora en función de los datos del informe. Así, se fijarán los plazos para valorar el cumplimiento de ese plan y, una vez finalizado todo el proceso, se emitirá un informe global que contenga las propuestas de mejora para sucesivas evaluaciones. La evaluación de las competencias personales será anual y el resultado final de la evaluación será la media de la puntuación obtenida en este apartado durante el período en el que el profesional haya permanecido encuadrado en el grado inmediatamente anterior.