El Servicio Gallego de Salud ha estimado una previsión de uso para este verano del 87% de las 7.200 camas que hay en las diferentes áreas sanitarias de la comunidad, lo que significa que se cerrarán unas 900. No obstante, el director general de Asistencia Sanitaria del Sergas, Jorge Aboal, ha insistido que esto no significa que no estén "disponibles" para ingresos en el caso de ser necesario y ha recordado que “en esta época del año se otorgan las vacaciones a los facultativos y también a los anestesistas”.
En el verano de 2015, la previsión de uso fue del 86% de las 7.315 camas disponibles para el verano y, finalmente, se empleó el 74,9%. Para esta época estival de 2016, la previsión es mantener operativas 6.190.
Preguntado por si no se pueden adelantan intervenciones en la época estival aprovechando esa baja demanda, Aboal ha esgrimido que la capacidad quirúrgica también "disminuye" porque los anestesistas tienen vacaciones y es una especialidad que "no tiene paro" en este comunidad, con lo que tampoco se puede recurrir a "contratar a anestesistas con título dudoso".
Por su parte, CIG-Saúde ha exigido a la Consejería de Sanidad que detalle la publicación de "todos los cierres de camas previstos para este verano" y ha señalado que, según los datos que ha ido recibiendo de las diferentes áreas sanitarias, "será alrededor de 1.200 camas", parecido a 2015.
"Los grandes complejos hospitalarios cerrarán durante este periodo más de 200 camas cada uno", ha denunciado la secretaria nacional de CIG-Saúde, María Xosé Abuín, quien ha avisado de que el área de Vigo, "con todos los problemas que están padeciendo, es una de las más afectadas, ya que además de camas cerrarán unidades de quirófanos".
Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.