La
Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) ha presentado esta semana la evaluación del gasto sanitario de Extremadura, en el que recalca que el propio organismo “evidencia un importante
margen de mejora” en el diseño de la política farmacéutica, así como en su despliegue y ejecución. Según el documento de la Autoridad Independiente, durante la evaluación se ha constatado la “debilidad” de la red de uso racional del medicamento en la Atención Primaria del
Servicio Extremeño de Salud (SES), pues asume principalmente tareas de salud pública que relegan a un segundo plano las actuaciones y funciones de promoción del “uso racional del medicamento”.
Esta situación se da a pesar de que la región cuente con una
“extensa red de farmacéuticos” en los equipos de su
Atención Primaria. En ese sentido, la
Airef plantea reforzar dichos servicios de farmacia y
aprobar un nuevo modelo “orientado” a las funciones de la
atención farmacéutica y al uso racional de los fármacos. Y es que la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal argumenta en su análisis que existe un
deterioro progresivo de los indicadores de calidad de la prescripción farmacéutica “en todas las áreas de salud de Extremadura”, para lo que plantea la elaboración de una
estrategia de farmacia enfocada a mejorar esos índices y lograr, así, mejoras de
eficiencia para el sistema sanitario público autonómico.
Por otro lado, debido a la
situación farmacéutica del SES, el órgano del Estado pone encima de la mesa la posibilidad de llevar a cabo una
guía farmacoterapéutica para los centros sociosanitarios, así como un plan terapéutico único del paciente sociosanitario para lograr “una mayor homogeneidad y calidad en la prestación y atención farmacéutica de los pacientes institucionalizados”. También pone como solución al escenario que vive la
sanidad extremeña el desarrollo de un
sistema de información común y unificado que integre la información social y sanitaria de los residentes para una mejor coordinación.
Alta tecnología sanitaria en el SES
La
inversión en los equipos de alta tecnología se ‘come’ solamente el
0,2 por ciento del gasto sanitario de Extremadura. No obstante, se trata de una partida de vital importancia para la población médica, pues con esas herramientas logran atender de manera más eficaz y rápida a los pacientes. En líneas generales, y según el propio informe de la Airef, Extremadura cuenta con una renovación tecnológica de su material sanitario adecuado, de acuerdo al
Plan de Inversión De Equipos de Alta Tecnología (Plan Inveat), aunque pone el foco en las modalidades no incluidas en el mismo, como son los
mamógrafos convencionales o equipos de
Radiología, en los que sí identifican “una notable antigüedad”.
Para ello, la Autoridad Independiente propone definir e implantar un proceso estructurado para la
planificación estratégica de las decisiones de inversión en alta tecnología, con el fin de mejorar el modelo de gobernanza y de toma de decisiones en la implementación tecnológica en el
sistema sanitario regional. “Esto se podría llevar a cabo con un marco normativo específico, con una periodicidad, metodología y etapas definidas, y cuyos resultados se recojan en un plan estratégico. Se propone también que el proceso vaya seguido de un plan de implementación que incluya plazos, fases, financiación, responsabilidades y recursos asignados, así como un seguimiento, evaluación y actualización periódica”, recalca la evaluación de la Airef.
Inversiones del SES en fármacos y tecnología
El
gasto farmacéutico hospitalario, el gasto en
medicamentos dispensados con receta médica en oficinas de farmacia y el gasto en
medicamentos de centros sociosanitarios alcanzaron, en total, los
588 millones de euros durante el año 2022, según especifica el informe del organismo. Se trata de más de una cuarta parte del gasto público sanitario total y de un
2,8 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) de la región extremeña. En relación a la alta tecnología del SES, en 2022 se dedicaron cuatro millones a esa partida.
Más concretamente, la Airef constata que el gasto farmacéutico público hospitalario en Extremadura ha sido de
193 millones de euros en 2022, confirmando la tendencia al alza desde el 2003. Entre los hallazgos identificados por la autoridad fiscal, destaca el “fuerte impulso” dado en los últimos años al fomento de los
medicamentos biosimilares por parte de la sanidad extremeña. Un uso que, tal y como recuerda la Airef, en Extremadura se encuentra
“por encima de la media nacional”.
No obstante, el organismo considera que existe “margen de mejora” en el
uso de biosimilares de alto impacto económico con menor trayectoria en el mercado. Para ello, propone elaborar y aprobar un
plan para fomentarlos, “especialmente en determinados hospitales y servicios asistenciales”.
Por otro lado, la entidad afirma que el gasto farmacéutico en medicamentos dispensados con receta en oficinas de farmacia ha registrado un incremento muy importante en Extremadura en las últimas dos décadas,
cerrando el año 2022 como el mayor de su serie histórica y del conjunto estatal.
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