Vocación global y democratizadora en el epicentro del fenómeno CART catalán

El corazón de las CAR-T en España permanecerá en Cataluña, región que concentra el 60 por ciento de las capacidades de terapias avanzadas del país, y las potenciará con la creación del hub de terapias avanzadas y el Centre de Teràpies Avançades de Catalunya (CTAC). Desde el anuncio del encargo del Govern al Departament de Salut para su impulso el pasado noviembre, los actores implicados han trabajado sin hacer mucho ruido preparando el cierre del proyecto y la presentación pública, prevista para este febrero.

El hub de terapias avanzadas tendrá tres grandes verticales: las terapias génicas, las terapias celulares y la investigación de tejidos. Así lo recogerá la propuesta del grupo de trabajo que, bajo la coordinación del Banc de Sang i Teixits (BST), está aterrizando y concretando los detalles del proyecto, mientras que el coordinador institucional del hub de terapias avanzadas es Biocat. Su director general, Robert Fabregat, da a conocer más detalles de este proyecto en una entrevista a Redacción Médica, con el objetivo de que "el hub de terapias avanzadas lidere la investigación en este ámbito a nivel internacional".

De los tres ejes, la terapia génica engloba aspectos como la edición genética y vectores virales, siendo Cataluña una región que destaca por "centros punteros", aunque estos también "tienen necesidades a veces de subcontratar capacidades en otros países", un apoyo que el BST podrá facilitar con la creación de este centro. Por su parte, la segunda es la terapia celular, donde lo más conocido son las CAR-T, que podrán ser potenciadas, más allá del Hospital Clínic y el Hospital Sant Pau, en el Vall d'Hebron Instituto de Oncología (VHIO) y el Institut Català d'Oncologia. Además, por último, el hub también se centrará en los tejidos, como medicina regenerativa y biomateriales.

"El objetivo es que el hub de terapias avanzadas lidere la investigación en este ámbito a nivel internacional"

El CTAC estará abierto "a incorporar nuevas terapias disruptivas y emergentes que ahora mismo no están reguladas", asegura Fabregat. La principal finalidad de este centro "será complementar la investigación y se centrará en la parte clínica para que la investigación llegue más rápido a fases avanzadas y así dar respuesta más pronto a las necesidades de los pacientes", añade el director general de Biocat.

Así, las CAR-T desarrolladas por el Hospital Clínic y que ahora están encima de la mesa de la Agencia Europea del Medicamento podrían convertirse en las primeras de origen académico aprobadas en Europa, un impulso para el refuerzo de las terapias que nacen en este ámbito y potenciadas por el sector público para ofrecer innovaciones "más baratas y accesibles".

Infraestructura y personal del Hub de terapias avanzadas

El Banc de Sang i Teixits aportará la infraestructura, haciendo uso de los espacios y capacidades existentes, del Centre de Teràpies Avançades de Catalunya, antes denominado Centre Nacional de Teràpies Avançades, que será la clave para garantizar la conexión entre la generación de terapias avanzadas en el marco de los sistemas públicos de salud y de investigación e innovación, y el tejido industrial, incrementando el impacto social y económico de un sector al alza y de alto valor añadido, según el Govern.

Roger Fabregat, director general de Biocat.

Además, el BST estudiará las nuevas capacidades de equipamientos que se podrían incorporar, una vez se hable con los agentes implicados. Por otra parte, la otra pata de este hub de terapias avanzadas es el personal y se deberá analizar si la plantilla actual es suficiente o es necesario incorporar más profesionales, según avanza Fabregat.

"Es necesario formar gente para terapias avanzadas y hace falta retenerla en el sector público", refleja el director general de Biocat. También en el ámbito de regulatoria porque es una cuestión "que se va actualizando y la gente muy preparada permite avanzar más rápido", añade.

¿Qué se ha acordado con el Gobierno?

Esta iniciativa ha suscitado el interés del Gobierno, que a través del Ministerio de Ciencia e Innovación y el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) ha mantenido reuniones con los impulsores del hub de terapias avanzadas. "La reunión fue para coordinar las estrategias, complementar las convocatorias y no solaparnos entre el Govern y el Estado, sino que todo se vaya sumando", relata Fabregat.

Hace dos años y medios que tanto el Departament de Salut como el de Recerca i Universitats de Cataluña trabajaban en esta cuestión y las reuniones han servido para "tranquilizar nervios del resto de actores y aclarar que las estrategias se van a coordinar", agrega. Tanto es así que el director del ISCIII, Cristóbal Belda, ha visitado y conocido las instalaciones de BST en las últimas semanas.

Aún queda por valorar si las infraestructuras del Banc de Sang i Teixits son suficientes y si es necesario contratar más profesionales

La previsión de financiación a tres años es de sesenta millones de euros, a razón de veinte millones de euros al año entre los recursos asistenciales y las ayudas de investigación. El director general de Biocat deja claro que "no depende de si hay nuevos presupuestos o se prorrogan los actuales".

Por último, los dos objetivos de este Centre de Teràpies Avançades de Catalunya son "abaratar al máximo los costes y democratizar las terapias". Si la innovación viene del entorno público el coste será menor y se garantiza que será mucho más accesible, aunque se trabajará la colaboración público privada para que sea el sector privado quien industrialice y lleve al mercado el producto tras un acuerdo entre ambas partes, relata Fabregat. "Es un win win para todos", concluye.