El Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC) y Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) pactan la
hoja de ruta sanitaria en el preacuerdo de investidura. Ambas formaciones se comprometen a
mantener las líneas estratégicas en sanidad iniciadas durante esta legislatura.
El primero de los tres principales acuerdos en sanidad es el de mantener y
consolidar las mejoras laborales -retributivas y organizativas- de los profesionales sanitarios, hechas en 2023 y principios de 2024. El segundo pacto es
culminar la armonización de las condiciones laborales del conjunto de los trabajadores sanitarios, "consiguiendo que sean homologables" y reforzando la visión unificada del sistema, según se detalla en el documento del preacuerdo, al que ha tenido acceso Redacción Médica.
El
tercer compromiso entre PSC y ERC es
mantener las inversiones hospitalarias y cumplir el calendario previsto, especialmente en nueve actuaciones: el nuevo Hospital Clínic; el nuevo Campus Salut de Girona; el nuevo Hospital de Terres de l'Ebre que, mientras la construcción no esté finalizada, se continúe con la mejora prevista del Hospital Verge de la Cinta; y la
ampliación prevista del Hospital de la Vall d'Hebron.
También se incluyen las inversiones para la
renovación y mejora del Hospital Joan XXIII de Tarragona; culminar la ampliación del Hospital del Mar; reforzar el parque hospitalario de Lleida, formado por el Hospital Universitari Arnau de Vilanova y el Hospital Universitari Santa Maria, a través de la construcción del nuevo edificio de consultas externas del primero y la ampliación del nuevo bloque quirúrgico, entre otras cosas; continuar con la
planificación del Nou Hospital Vallès Sud; y continuar con los procesos de republificación.
Otros compromisos sanitarios
Además, dentro de otros ámbitos, el preacuerdo de investidura que será
sometido a votación por parte de la militancia de ERC este viernes, consta el mantenimiento de la
mejora de las condiciones de los profesionales en el ámbito rural para garantizar la atención en la salud en el conjunto del país.
Otro acuerdo, además del
"concierto económico solidario", es el de implementar centros territoriales de salud bucodental, así como
desplegar el Pacte Nacional de la Salut Mental a través del Programa para la implementación y seguimiento de las estrategias y objetivos estratégicos del Pacte Nacional de Salut Mental.
En cuanto al impulso del
uso social del catalán y garantía de los derechos lingüísticos y en el marco de aplicación de los planes de fomento del catalán desarrollados por los departamentos de Salut y Derechos Sociales, se acuerda establecer un
calendario de capacitación del personal y normalización del uso que garantice la atención activa en catalán a los usuarios a lo largo de la legislatura, y ejecutar las medidas pertinentes para lograrlo.
Además, se establece continuar con el
despliegue de la atención integrada social y sanitaria a las residencias de gente mayor, y mantener las experiencias de integración ya desplegadas territorialmente, así como mantener el derecho que las mujeres puedan
escoger entre los dos métodos de interrupción voluntaria del embarazo en todas las regiones sanitarias.
Por último, el documento recoge el acuerdo para un
nuevo modelo de financiación singular, ya que "Cataluña sufre una
infrafinanciación sostenida en el tiempo que supera con exceso el que correspondería a un modelo de solidaridad entre territorios". El preacuerdo sostiene que los diversos modelos de financiación autonómica han comportado
graves deficiencias para Cataluña, que se traducen en "una
insuficiencia financiera crónica que limita enormemente el gasto en políticas públicas como la salud, los servicios sociales, la vivienda o las infraestructuras".
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