La consellera de Salut de la Generalitat de Catalunya,
Olga Pané, se marca como una de las prioridades
ajustar la financiación por la estabilidad económica del sector. Cataluña destina en la actualidad el
5,7 por ciento de su PIB a sanidad. "
Queremos llegar al 7 por ciento de financiación del PIB para Salut. No es ningún disparate, pero
no lo podremos hacer de repente", ha manifestado la consellera.
Así ha dado a conocer la consellera de Salut este miércoles las
líneas de actuación del Departament en el Parlament. Pané ha emplazado a los miembros de los grupos parlamentarios presentes en la Comissió de Salut a abordar esta cuestión en el
Pacte de Salut,
promovido por su predecesor, Manel Balcells, para debatir un
"consenso general de revisión del sistema de financiación".
En su primera intervención, Pané ha puesto de manifiesto la sostenibilidad económica y el hecho de que cada año "el presupuesto que se aprueba en el Parlament tiene una
diferencia de 3.000 millones" con el finalmente ejecutado. "Tensiona tremendamente las finanzas de nuestros proveedores, provoca problemas enormes de tesorería y dificulta y
compromete las finanzas de la Generalitat", ha agregado. A corto plazo, esta situación "compromete esta legislatura", pero a largo plazo y si no se resuelve,
"comprometerá la respuesta sanitaria del conjunto de nuestros proveedores", ha señalado.
Retos sanitarios de legislatura
Para Pané, los grandes hitos de esta legislatura son tres:
fortalecer la Atención Primaria para dar respuesta en un máximo de 48 horas, la sostenibilidad financiera del sistema de salud y garantizar un modelo de evaluación solvente desde la excelencia y la buena gestión. La consellera de Salut ha destacado el
"papel central en la respuesta de la vejez" de esta red asistencial y su capacidad para resolver problemas de salud y filtrar hacia los hospitales para mejorar la eficiencia.
En ese sentido, ha instado a revertir la
pérdida de coordinación e integración entre servicios. "Tenemos poca longitudinalidad si cambiamos cada año de médico de Familia.
Debemos pensar en el equipo, que puede ser la referencia, con médicos, enfermeras, trabajadores auxiliares, asistentes clínicos y otros profesionales", ha apuntado Pané.
En cuanto a la evidencia y evaluación, la consellera de Salut ha remarcado que "no se puede llevar ninguna política adelante si el proyecto no contempla en qué se sustenta, el seguimiento y rendición de cuentas.
No podemos anteponer las decisiones ideológicas a la evidencia". En este sentido, una medida concreta es fortalecer la Agència de Qualitat i Avaluació Sanitàries de Catalunya (AQuAS).
Otra de las prioridades del Departament de Salut es la
salud mental de los menores, adolescentes y jóvenes. Por ello, la Consellería encabezada por Pané implementará un Plan de abordaje de los trastornos del neurodesarrollo y de los problemas de aprendizaje integrado junto al Departament d'Educació y el de Drets Socials.
Junto a la financiación, también forman parte de las prioridades de Pané el envejecimiento sano y la Atención Primaria, la atención integrada, social y sanitaria, la salud pública, la salud bucodental y los
profesionales como "núcleo del sistema sanitario". Asimismo, el resto son la salud mental infantil y juvenil, el sistema sanitario con agenda verde, la
reforma y sostenibilidad del sistema de salud, evidencia y evaluación, transformación digital y la financiación.
Oposición vigilante
Por parte de los grupos parlamentarios que forman parte de la oposición, todos a excepción del que está en el Govern (PSC), el diputado de Junts per Catalunya
Jordi Fàbrega ha manifestado que comparte el diagnóstico, pero ha escuchado
"muchos 'qués' y pocos 'cómos". Fàbrega ha pedido ser más ambicioso para llegar al 8 por ciento del PIB catalán para Salut y ha interpelado a la consellera por la
republificación que consta en el acuerdo de investidura y la
defensa del Govern del modelo de sanidad en Madrid.
Por parte de ERC,
Juli Fernández ha manifestado que Pané tiene ante sí una "oportunidad política para que el sistema de salud disponga de los recursos necesarios para poder hacer muchas de las cosas que usted planteaba y otras que plantearemos, la
soberanía fiscal del país". Uno de los pactos del acuerdo de investidura entre PSC y ERC, al que se sumó Comuns, y cuya siguiente prueba de fuego será la
negociación de los presupuestos de la Generalitat 2025.
En el caso del PP,
Hugo Manchón ha pedido a la consellera defender el
modelo de "éxito que funciona en Cataluña, la colaboración público privada", además de preguntar a la consellera de Salut por la sustitución de profesionales en verano, la política lingüística en los hospitales y centros de salud y las listas de espera. Sobre esta última cuestión también ha hecho hincapié la diputada
María Elisa García de Vox, quien ha instado a revertir la situación actual, entre otras medidas, reduciendo el sobrecoste que a su criterio provocan los altos cargos del Departament, la
atención a la inmigración ilegal en Urgencias y la falta de optimización de los recursos existentes.
El diputado
David Cid, de Comuns, ha señalado que
el acuerdo de investidura es "ambicioso", a la vez que se ha preocupado por el crecimiento de seguros privados. Entre otras medidas, ha destacado el impulso que hará el Departament en
Odontología y el dentista público. Por su parte,
Laia Estrada, de la CUP, ha criticado el modelo de la sanidad catalana, a su criterio principal problema de la situación actual. El turno de intervenciones lo ha concluido la portavoz del PSC-Units per Avançar,
Sara Jaurrieta, quien ha destacado que el planteamiento de la consellera pone a la "persona en el centro" y los ítems propuestos por la consellera siguen la línea
"para trabajar para mejorar la sanidad pública".
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