Redacción. Barcelona
Los funcionarios catalanes están preocupados por la intención de que sus impuestos tributen a la Hacienda catalana y no a la Agencia Tributaria estatal. La Central Sindical Independiente de Funcionarios (CSIF), mayoritaria en la función pública catalana, está trabajando en un formulario para que los trabajadores públicos puedan dejar constancia por escrito de que desean que su IRPF sea entregado a la Agencia Tributaria estatal, como marca la ley.

Miguel Iborra, presidente del CSIF.

El primer caso es el de la Diputación de Barcelona, que esta misma semana ha notificado a sus trabajadores que liquidará sus impuestos a la Agencia Tributaria catalana, en vez de la estatal.

En una reunión con la delegada del Gobierno en Cataluña, Llanos de Luna, el presidente de CSIF, Miguel Iborra, ha expresado la preocupación de los trabajadores públicos ante esta situación.

Tras la creación de la Agencia Tributaria catalana, esta decisión podría extenderse a otras administraciones autonómicas y afectar también al personal sanitario.


Iborra ha explicado que su sindicato trata de evitar que “por una decisión política” se les pueda exigir un doble pago del impuesto a estos trabajadores. Esta es la razón del escrito que “blinda” el pago del IRPF al Estado central. Por su parte, la delegada del Gobierno en Cataluña ha transmitido su “total apoyo” y el amparo del Ejecutivo, así como “la tranquilidad de que el Gobierno va a hacer cumplir la ley”.