La
satisfacción de los usuarios de los
servicios sanitarios públicos catalanes era mejor en el peor momento de la crisis que ahora, según el último
Indicador de Bienestar y Progreso Social que ha sido elaborado por el Instituto de Estadística de Cataluña.
El Indicador también destaca que
desde que comenzó la crisis económica, los catalanes han ido sintiéndose cada vez más
insatisfechos con los servicios sanitarios públicos que han recibido, siendo 2013 y 2016 los años que peores resultados han obtenido.
En este momento, un 90 por ciento de los encuestados ha afirmado sentirse satisfecho con los servicios públicos, pero en 2012, uno de los peores momentos de la
crisis económica, este porcentaje era de un 90,2 por ciento, una cifra ligeramente superior que demuestra que antes de los
recortes la población estaba más contenta con el trato recibido.
Desde que se produjo el incio de la crisis la sanidad pública catalana vivió una
oleada de recortes que mermaron considerablemente la calidad de los servicios prestados y que conllevaron despidos,
cierres de camas y plantas en los centros hospitalarios y el
aumento de las listas de espera, uno de los grandes problemas que todavía tiene por resolver la Consejería de Salud de la Generalitat de Cataluña.
Los pacientes catalanes se encuentran peor
El documento elaborado por el Instituto de Estadística de Cataluña también ha podido contrastar que los pacientes catalanes consideran que su e
stado de salud es peor este año que el anterior. En concreto, el 19,7 por ciento de los encuestados ha confirmado que en general se encuentran peor que hace un año.
En este caso, el número de encuestados que ha asegurado tener un estado de salud peor que en los años anteriores
ha subido casi 3 puntos, ya que en 2016 eran un 16,6 por ciento, en 2015 un 16,7 por ciento y en 2014 un 16,8 por ciento.
Exceso de peso de los menores
Finalmente, es necesario destacar que el
exceso de peso entre la población infantil catalana empieza a ser un asunto importante, ya que desde que comenzó la crisis económica ha aumentado de forma considerable el número de niños y niñas de entre 6 y 12 años de edad que sufre sobrepeso.
En 2013, el número de menores con este problema era de un 31,1 por ciento, una cifra que ya era alta por aquél entonces, pero que en este momento
ha llegado hasta el 36,3 por ciento de la población infantil. Esto significa que cada vez son más los pequeños que sufren sobrepeso y que pueden desarrollar enfermedades a largo plazo debido al exceso de peso.
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